Saltar al contenido

Hay situaciones que no dependen de nosotros sino tan solo de Él

La Palabra de Dios nos dice que mientras el mundo exista habrá siembra y cosecha, calor y frío; es decir que lo que estamos pasando es momentáneo porque son estaciones que han de cambiar. Por tanto, no podemos desesperarnos sino esperar con paciencia la promesa de nuestro Padre Celestial.

A veces nuestra alma se desespera y esto no permite que se cumpla el tiempo establecido para que Dios obre. Nos impacientamos de tal manera que nos olvidamos de todo, tan solo por querer hacer las cosas en nuestro tiempo y no en el de Dios. Cuando Dios le dio la orden a Noé para que construyese el arca pasaron 100 años para que él viera el propósito cumplido ¿Podía Noé hacer que lloviera antes? No, porque eso no dependía de él sino de Dios.

Así, hay situaciones que no dependen de nosotros sino sólo de Él, y querer hacer correr el tiempo de nada nos vale. Al contrario, nos ponemos en contra de Su voluntad. Esto sí es peligroso, cuando empezamos a contender con Dios.

Si el tiempo pasa y no hay señales o indicios de cambios, pregúntale: ¿Qué estás enseñándome que no logro entender? Porque cuando esto suceda entenderemos que ese tiempo es necesario para nosotros madurar y prepararnos para lo próximo que va a darnos.

Por la pastora Montserrat Bogaert/ Iglesia Monte de Dios

Ensegundos.do

Ensegundos.do

Es un medio de comunicación a través de la Web, fundado el 30 de junio del año 2007, por el periodista José Peguero. Surge con la motivación de crear un espacio dominicano en la red donde sus lectores, no sólo puedan estar informados sobre los acontecimientos más recientes de los ámbitos sociales, políticos y de entretenimiento, de alcance nacional e internacional, sino que además puedan expresar sus opiniones y aportaciones de manera pública de los temas debatidos.