El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó este miércoles con recortar «radicalmente» los programas de ayuda a países que no demuestren esfuerzos reales para controlar los flujos de migración ilegal hacia territorio estadounidense.

«Hay países a los que damos enormes sumas de dinero en ayuda. Decenas de millones de dólares. Y estamos trabajando en un plan para reducir esa ayuda, porque ocurre que yo creo que no es tan difícil» controlar la migración, dijo el mandatario.



Trump participó este miércoles en una mesa redonda con funcionarios y familiares de víctimas de la violencia perpetrada por pandillas, en particular la Mara Salvatrucha (MS13), pero en sus declaraciones no identificó ningún país en particular.

Esos países no identificados «les van hacer creer que están tratando de contener esto. Pero no lo están haciendo. Pienso que ellos impulsan a esas personas a irse. Ellos no quieren esas personas y nosotros las tenemos aquí», comentó.



Por ello, Trump dijo que su gobierno está empeñado en reformar «toda nuestra estructura de ayuda. Y cambiará radicalmente».

La idea es que cada vez que una persona ingresa ilegalmente a territorio estadounidense y se suma a las pandillas, en particular la MS13, «vamos a deducir una alta suma del dinero que les damos como ayuda» al país de procedencia.

«A pesar de todos los reportes que escucho, no creo que nos estén ayudando», dijo.

No se trata de la primera mención de Trump a recortes en la ayuda a países de donde provienen pandilleros.

En abril, el mandatario ya había advertido que la ayuda estadounidense a Honduras estaba «en juego» si ese país centroamericano no hacía más esfuerzos por controlar la migración hacia territorio estadounidense.

Durante el gobierno de Barack Obama, Estados Unidos firmó la Alianza para la Prosperidad con Honduras, Guatemala y El Salvador, plan que incluía mecanismos de ayuda financiera para controlar la violencia y reinsertar emigrados expulsados.