Estados Unidos enviará un equipo a Singapur para preparar la cumbre del 12 de junio entre el presidente Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un, pese a que no hay certeza sobre su realización, informó este sábado la Casa Blanca.
El anuncio, que se produce tras un encuentro sorpresa entre Kim y el mandatario surcoreano Moon Jae-in, es la última señal de que la cumbre podría realizarse como planeado pese a las marchas y contramarchas.
«Un equipo de avanzada de la Casa Blanca partirá rumbo a Singapur como estaba previsto con el fin de preparar la cumbre en caso de que ésta tenga lugar», dijo la secretaria de prensa de la presidencia, Sarah Sanders.
Trump canceló la cumbre el jueves, alegando la «abierta hostilidad» de Pyongyang, pero el viernes dio marcha atrás después de que Corea del Norte dijera que estaba dispuesto a hablar «en cualquier momento».
El mandatario estadounidense indicó que «incluso podría ser el 12», fecha en que la cumbre había sido fijada.
«Estamos hablando con ellos ahora», dijo Trump. «Ellos realmente quieren hacerla. Nosotros queremos hacerla. Veremos qué pasa», agregó.
Este sábado, Moon se reunió con Kim en la Zona Desmilitarizada que divide a la península coreana, con el fin de «garantizar el éxito de la cumbre entre Estados Unidos y Corea del Norte», informó el gobierno de Seúl.