WhatsApp quiere combatir las noticias falsas y la desinformación en su plataforma, uno de los mayores males que acusan las redes sociales en este momento y que se ha tornado especialmente problemático en el servicio de mensajería instantánea.
Las noticias compartidas sin fundamento y la propagación de cadenas de mensajes creados sin ninguna intención más allá que la de crear confusión entre sus receptores se han multiplicado en los últimos tiempos aha llegado el momento de ponerle freno.
Desde Facebook anuncian ahora los WhatsApp Research Awards, unos premios que se darán a aquellas personas que presenten proyectos que ayuden a mejorar la plataforma y combatir la difusión de bulos en la misma mediante propuestas originales.
Para incentivar la búsqueda de soluciones que realmente sean efectivas, la empresa realizará un concurso en el que aquellos que presenten las más útiles recibirán un premio de 50.000 dólares. Los detalles pueden ser encontrados en la página del proyecto y la fecha límite para presentar las propuestas se extiende hasta el próximo día 12 de agosto de 2018.
Un programa, por cierto, que se une al de Facebook estrenado en el mes de abril. En esta ocasión, sin embargo, se trataba de una nueva vía para dar recompensas a quienes descubrieran vulnerabilidades en la red social.
Las áreas clave
Desde Facebook, propietaria de WhatsApp, dan algunas líneas de actuación y áreas clave que consideran de máxima prioridad a tratar, aunque ya avisan de que las propuestas no tienen necesidad de limitarse únicamente a estas.
Los campos que más pueden ayudar a resolver los conflictos que se están generando en la actualidad en la plataforma son los siguientes: el procesamiento de información de contenido problemático, información relacionada con las elecciones, las redes y la viralidad, alfabetización digital y desinformación y la detección de comportamiento problemático dentro de sistemas encriptados.
De esta forma, la plataforma abarca buena parte de los problemas que más controversia han creado durante los últimos tiempos, como son la influencia en los procesos electorales o la realización de actividades potencialmente ilegales.
Una problemática a la que se están enfrentando las principales redes y servicios que interconectan personas a medida que aumentan su volumen de usuarios y que ahora Facebook quiere atajar para evitar que WhatsApp sea un foco de escándalos como los que ha tenido que hacer frente de manera reciente la compañía liderada por Mark Zuckerberg.
