Por Katherine Taveras

Quisiera construir un mundo de verdades, un espacio donde podamos ser y sentir sin prejuicios banales.



Quisiera un mundo de principios, de valores impuestos por un corazón con sentimientos y no por una sociedad que nos marchita.



Quisiera un mundo de ilusiones, donde el motor sea el cariño, donde haya más pasión que ganas, donde construyamos el camino que nos purifique el alma.

Quisiera un mundo de ideales donde no esperamos tarde, donde gritemos ¨te quiero¨ sin temor a ser cobardes.

Quisiera un mundo de conflictos sustanciales, donde no sepamos si reír con locura o llorar de tanta alegría.

Quisiera un mundo donde amar no sea riesgo, donde entregarse sea sinónimo de libertad, donde los estereotipos no nos deban gobernar.

Quisiera un mundo de verdades donde no amemos cuando ya sea tarde, donde la gracia acompañe nuestras vidas, donde aun nos impresionen las mentiras.

Quisiera un mundo de purezas donde nos diga la conciencia que la bondad y la gentileza no son actitudes casuales.

Quisiera un mundo de brindar abrazos sin medidas, un mundo de dar todo cuanto podemos, de valorar lo que tenemos, de hacer más de aquello que nos hace felices.

Quisiera un mundo mejor para ti y para mí.