La Convención Internacional sobre los Humedales advirtió hoy  de que estos ecosistemas, entre los más ricos del mundo por su biodiversidad, están desapareciendo a un ritmo alarmante, bajo los efectos del cambio climático y de la urbanización.

Esta convención, que fue firmada en 1971 en la ciudad iraní de Ramsar y entró en vigor en 1975, es el tratado internacional más antiguo sobre la protección del medioambiente. Fue ratificada por 170 países.



«Las zonas húmedas desaparecen tres veces más rápido que los bosques», afirmó la secretaria general de la Convención, Martha Rojas Urrego, con ocasión de la publicación de la primera edición de un informe sobre las perspectivas mundiales de estos ecosistemas.



Los autores del informe explican que entre 1970 y 2015, alrededor del 35% de las zonas húmedas del planeta (lagos y ríos, acuíferos subterráneos, pantanos, oasis, turbales, estuarios, manglares, arrecifes de coral, etc., pero también todos los sitios artificiales como los estanques de piscicultura y los arrozales) desaparecieron.

Y el ritmo de desaparición se aceleró desde principios de siglo.

Esta «desaparición acelerada» se debe al cambio climático, la demografía galopante y la urbanización, así como al impacto de la evolución en la utilización de las tierras y del agua en la agricultura.

Es «una voz de alarma», pues las zonas húmedas proporcionan directamente o indirectamente casi todo el agua dulce que se consume en el mundo, declaró Rojas Urrego, en un comunicado.

El informe muestra que ninguna región está libre de esta tendencia.

Según los expertos, las zonas húmedas actualmente cubren más de 12,1 millones de km2, una superficie más vasta que la de Groenlandia. Entre el 13% y el 18% está inscrito en la Lista de Ramsar de zonas húmedas de importancia internacional y se encuentra protegido.