Es normal intentar aguantar la necesidad de orinar de vez en cuando.

Cuando la vejiga se llena a la mitad con líquido, envía una señal al cerebro de que es hora de orinar. El cerebro crea la necesidad de orinar mientras le dice a la vejiga que se aguante.



Dolor

Las personas que regularmente ignoran la necesidad de orinar pueden sentir dolor en la vejiga o los riñones. Incluso hacer pis puede doler. Los músculos también pueden permanecer parcialmente apretados después de que se libera la orina, lo que puede provocar calambres pélvicos.

Infección del tracto urinario

En algunos casos, mantener la orina durante demasiado tiempo puede hacer que las bacterias se multipliquen. Esto puede conducir a una infección del tracto urinario. El consejo de no aguantar el pis demasiado tiempo es especialmente válido si el individuo tiene un historial de infecciones urinarias frecuentes.
Las personas que no beben suficientes líquidos pueden tener más probabilidades de desarrollar una infección del tracto urinario, ya que la vejiga no le dice al cuerpo que orine con la suficiente frecuencia. Esto puede causar que las bacterias se propaguen a través del tracto urinario, lo que lleva a una infección. Entre los síntomas se encuentran: sensación de ardor o escozor durante la micción, orina fuerte o fétida u orina sangrienta/muy oscura.



Estiramiento de la vejiga

A largo plazo, mantener la orina regularmente puede hacer que la vejiga se estire. Esto puede dificultar o imposibilitar que la vejiga se contraiga y libere la orina normalmente. Si esto sucede, pueden ser necesarias medidas adicionales, como un catéter.

Daño a los músculos del suelo pélvico

Retener frecuentemente la orina puede dañar los músculos del suelo pélvico. Uno de estos músculos es el esfínter uretral, que mantiene la uretra cerrada, para evitar que la orina se escape. Dañar este músculo podría provocar incontinencia urinaria. Hacer ejercicios del suelo pélvico, como los de Kegel, puede ayudar a fortalecer estos músculos y prevenir fugas o reparar la pérdida muscular.

Piedras en el riñón

La retención en la orina puede hacer que se formen cálculos renales en personas con antecedentes de la afección, o personas que tienen un alto contenido de minerales en la orina.