Muchos estudiantes y profesionales de América Latina no están bien informados acerca de las diferentes formas migratorias, especialmente, sobre algunos específicos como el visado para altamente calificados que quieran laborar en Europa.
Existen varios tipos de visa para ejercer un empleo en el extranjero, sin embargo, la autorización migratoria más efectiva para los profesionales de América Latina que desean dar un salto internacional en su carrera profesional es la visa para profesionales altamente calificados (también conocida como la Tarjeta Azul en la Unión Europea).
La razón por la cual hoy, decidí abordar este tema, fue debido a que muchos estudiantes y profesionales de América Latina no están bien informados acerca de las diferentes formas migratoria y creen que ciertos estereotipos e ideas erróneas son verdaderas.
Estereotipos e ideas erróneas
“¡La visa para profesionales altamente calificados es únicamente para los directivos!” o “Los requisitos para conseguir la autorización son inalcanzables!”
Esas son algunas de las afirmaciones que escucho cuando me reúno con clientes que desean construir su proyecto para trabajar en Europa. Afortunadamente, ¡todas son erróneas!
En lo que se refiere en las leyes migratorias, existe un principio jurídico compartido por casi todos los países del mundo. Este se podría resumir de la siguiente manera: las empresas deben reclutar en prioridad a las personas locales y si es que los departamentos de recursos humanos no encuentran las competencias deseadas, pueden contratar extranjeros.
La Unión Europea, a diferencia del resto mundo, tiene una particularidad muy interesante: es la única zona geográfica que considera como “locales” a todos los ciudadanos de los países miembros.
A partir del fundamento legal previamente mencionado, los diferentes países decidieron crear la visa de trabajo que hoy por hoy es la más utilizada en el mundo: la visa para profesionales altamente calificados.
Antes las personas que consideradas como “altamente calificadas” eran por naturaleza profesionales que tenían competencias que difícilmente se encontraban en los mercados laborales locales. Sin embargo, a lo largo de los años, esta definición ha evolucionado. En la gran mayoría de los países (incluidos los miembros de la Unión Europea), el ser profesionales altamente calificados no necesariamente se refiere a que la persona es un experto o un directivo de una gran empresa, sino que la persona cuente con una educación superior.
Los diferentes gobiernos del planeta buscan, a diferencia del pasado, un grupo de inmigrantes más “especifico”.
Requisitos
En realidad, los requisitos de aplicación para la visa de profesionista altamente calificado, ¡son más sencillos de cumplir que para la obtención de una visa de estudiante!
La razón de esta “sencillez”, se debe a que gran parte del trámite es hecho por las empresas y no por el candidato extranjero. Debido a lo anterior, podrás adivinar el requisito número uno para solicitar este tipo de visa de trabajo: debes tener una oferta de empleo por parte de una gran empresa o una Pyme de un sector estratégico.
Generalmente, existen dos otros requisitos importantes: el nivel educativo y el ingreso del candidato.
Los latinos que desean tramitar una visa para profesionales altamente calificados deben tener un nivel académico superior, lo que equivale a una maestría para países como Estados Unidos o una licenciatura en Europa.
En lo que se refiere al ingreso del candidato, en los países miembros de la Unión Europea, este requisito es muy variable. En algunas naciones, como Francia, debes comprobar un monto mensual mínimo igual al doble del salario mínimo (1525,47 €). En cambio, en Alemania, deberás tener un ingreso anual de 52 000 €.
A su vez, me gustaría añadir otros dos puntos que poca gente conoce acerca esta visa. El primero es que puedes solicitarla si tienes un proyecto empresarial en Europa o si estás estudiando una licenciatura, una maestría o un doctorado (para este último caso, los requisitos de remuneración serán más bajos).
Lo segundo que se debe tomar en cuenta, es que la Tarjeta Azul trae algunas ventajas para el portador. Por ejemplo, si está casado y/o tiene hijos, la familia tiene derecho a una visa de acompañante que les permite trabajar o estudiar en el país europeo.
Espero que este artículo sea de gran ayuda para definir la estrategia de visa para tu proyecto de trabajar en Europa.