El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se declaró el jueves víctima de un «acoso presidencial sin fin» al criticar fuertemente a los demócratas por investigar sus relaciones con Rusia y señalar que se están «volviendo locos».

«¡ACOSO PRESIDENCIAL! ¡Nunca se debe permitir que vuelva a ocurrir!», escribió Trump en su cuenta de la red Twitter.



Trump consideró que se desató «una continuación de la caza de brujas» con el anuncio de la  profundización de una investigación sobre sus nexos con Rusia por parte del Comité de Inteligencia en la Cámara de Representantes, controlada desde principios de enero por sus oponentes demócratas.



Adam Schiff, el congresista demócrata que encabeza dicho Comité, dijo que investigará las sospechas de connivencia entre Trump y el gobierno de Rusia y también las acusaciones más amplias de irregularidades financieras en el círculo íntimo del mandatario.

El poderoso comité trabajará en paralelo con una investigación muy avanzada que lidera el fiscal especial Robert Mueller sobre supuestos vínculos entre Trump y agentes rusos durante la campaña electoral de 2016 que acabó llevándolo a la Casa Blanca.

«El congresista Adam Schiff anuncia, después de no haber encontrado ninguna colusión (de intereses) rusa, que va a ver todos los aspectos de mi vida, tanto financieros como personales, aunque no haya ninguna razón para hacerlo. ¡Nunca antes había sucedido! Acoso presidencial sin fin…», tuiteó Trump.

El fiscal general interino de Trump, Matthew Whitaker, tiene previsto comparecer ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes el viernes. El comité está amenazando con una citación si se niega a declarar y entregar comunicaciones que tuvo con el presidente en relación con la investigación de Mueller sobre injerencia Rusia.

Trump ha declarado en repetidas ocasiones su inocencia, alegando que las crecientes pesquisas, que también incluyen investigaciones de fiscales federales en Nueva York, tienen motivaciones políticas. 

Sin embargo, Mueller ya presentó cargos contra seis personas vinculadas a Trump en el marco de su investigación sobre los nexos con el gobierno ruso de Vladimir Putin.

El martes por la noche, en su discurso sobre el Estado de la Unión ante el Congreso en pleno, Trump denunció con inusual virulencia las investigaciones «ridículas» y «partidistas», aludiendo particularmente a la que lleva adelante Mueller.

– ¿Evasión fiscal presidencial? –

Los críticos del presidente dicen que lo que no se sabe sobre el funcionamiento financiero del imperio inmobiliario de Trump y sobre su interés en hacer negocios en Rusia genera un contexto preocupante que requiere una investigación más profunda.

A diferencia de los presidentes anteriores, Trump se ha negado a revelar sus registros fiscales. Sus abogados afirman que han estado siendo revisados por el Servicio de Impuestos Internos desde 2002.

Un análisis del The New York Times de 2016 basado en información de acceso limitado concluyó que Trump puede haber pagado impuestos mínimos o incluso ningún impuesto cada año desde 1995.

El Presidente del Comité de Formas y Medios de la Cámara de Representantes, el legislador demócrata Richard Neal, tiene el poder de revisar en privado las declaraciones de impuestos de cualquier persona y la posibilidad de hacerlas públicas.

Sin embargo exigir los registros de impuestos de Trump al Tesoro podría llevar a una batalla legal sobre las prerrogativas presidenciales.

– ¿Mayores chances de destitución? –

Después de ser sofocados durante dos años por la mayoría republicana, los demócratas ganaron el control de la Cámara en noviembre, lo que les permitió iniciar una ofensiva basada en investigaciones contra la Casa Blanca de la misma manera que, contrariamente a lo que dijo Trump el jueves, los republicanos lanzaron frente a su antecesor, el demócrata Barack Obama.

Esas investigaciones se sumarían a la carga legal y política que enfrenta Trump con la investigación de Mueller sobre posible injerencia rusa en 2016 y la del Departamento de Justicia en Nueva York sobre varias actividades de su campaña política y la Organización Trump, su compañía paraguas.

Juntas, las pesquisas elevan la posibilidad de que Trump pueda enfrentar un juicio político con fines de destitución si se le responsabiliza de faltas graves.

La audiencia del Comité de Formas y Medios el jueves, al abordar detalles de los impuestos que involucran a Trump traspasaría lo que éste calificó en 2017 como una línea roja: que las investigaciones no deben afectar su negocio y sus finanzas privadas.