La presidenta de Time’s Up, Lisa Borders, renunció a su cargo luego que su hijo fuera acusado de abuso sexual, anunció ayer el movimiento creado tras el escándalo de Harvey Weinstein.
Expresidenta de la Liga de Baloncesto Femenino WNBA, Borders tomó las riendas de Time’s Up a principios de octubre, convirtiéndose en la primera directora ejecutiva de la organización que lucha por la igualdad de género y contra el acoso sexual en el entorno laboral.
Una mujer le dijo al diario Los Angeles Times que fue agredida sexualmente por el hijo de Lisa Borders, Garry «Dijon» Bowden Jr, durante una sesión de terapia.
Bowden trabaja con un método terapéutico que combina la espiritualidad y el masaje. Su presunta víctima, que lo conocía bien, le pidió una sesión, que se realizó en la casa del hombre.
Durante la sesión, supuestamente le hizo tocamientos sexuales. «Fue asqueroso», dijo a Los Angeles Times, y añadió que había puesto una denuncia ante la policía en Santa Mónica, California.
A través de su abogado, Dijon Bowden negó haberse comportado de manera inapropiada.
Sin embargo, su madre informó del caso a los otros miembros del consejo de administración de Time’s Up y les anunció su intención de renunciar.
«También sentimos que fue la mejor decisión para todas las partes», escribió Time’s Up en su cuenta de Instagram.
«Le recomendamos encarecidamente a cualquier persona que haya sido víctima de acoso sexual, agresión sexual o de medidas de extorsión en su lugar de trabajo que se comunique con el Fondo de Apoyo Legal de Time’s Up para obtener ayuda», agregó la organización en el mensaje.
