SANTIAGO.-Los jueces Osvaldo Castillo, Esther Reyes y Luis Ernesto Paulino, del Primer Tribunal Colegiado de aquí condenaron ayer a cinco empleados de Aduanas por desfalco y una pasajera por contrabando de US$136,557 dólares que intentó en el año 2015 introducir por el Aeropuerto Internacional del Cibao.
Los magistrados condenaron a 3 años de prisión suspendida parcial a la pasajera Osairy Quezada Perdomo, a cumplir siete meses en la cárcel de Rafey mujeres y los restantes en el domicilio que aportó al tribunal, no podrá viajar al extranjero y los dólares decomisados.
Mientras que los empleados de aduanas, Ramón Hipólito Henríquez Tejada, Domingo Antonio Pilarte Jiménez, Leovigildo Ubiera Paulino, Mairelin Rodríguez Batista y Nery del Carmen Correa de Lantigua, fueron condenados, 5, 4 y 3 años de prisión que deberán cumplir en la cárcel de Rafey.
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En el caso de Correa de Lantigua, los 3 años de prisión fueron suspendidos para que seis meses de ellos sean cumplidos en el Rafey mujeres y los restantes en el domicilio que fue aportado por el tribunal. La lectura integral de la sentencia fue fijada para el próximo 13 de mayo, en horas de la tarde.
Con relación a los también empleados de la Dirección General de Aduanas, Marcos Daniel Felipe González, Benito Henríquez Tejada y Luz Carlina Infante Fermín, fueron encontrados no culpables de desfalco por insuficiencia de pruebas y fue dictada sentencia absolutoria en su favor.
Quezada Perdomo a su salida del tribunal reiteró que trajo 298 mil dólares y no US$136,557 como reportaron las autoridades.
“Se robaron más de la mitad y me hubiese gustado que le dictaran un poco más de años al ladrón más grande que fue Ramón Hipólito, abusó del poder y robó la mayoría del dinero”, apuntó Osairy.
La investigación de este caso inició luego que Osairy Mercedes Quezada trajo de contrabando una cantidad indeterminada de dólares ocultos en una maleta y que supuestamente solo fueron reportados 136 mil 557 dólares, por los empleados de aduanas en el Aeropuerto Internacional del Cibao.
Quezada, arribó por la terminal aérea el 29 de junio del año 2015 en un vuelo de la aerolínea Jet Blue, procedente de la ciudad de Nueva York y no fue hasta una semana después que la Dirección General de Aduanas se querelló en contra los implicados.
