Los Angeles, Estados Unidos. El estelar alero Kevin Durant lideró anoche la aplastante victoria de los Golden State Warriors por 132-105 ante Los Angeles Clippers en el tercer encuentro de su serie de los playoffs de la NBA, adelantando 2-1 a los suyos y vengándose de la histórica remontada sufrida en su último juego.
Mientras, en el primer encuentro de la velada, el base australiano Ben Simmons comandó el triunfo de Filadelfia 131-115 ante los Brooklyn Nets, poniendo de nuevo por delante a los 76ers 2-1 en la serie.
Los Warriors, vigentes campeones de la competición, dejaron escapar en el segundo partido una ventaja de 31 puntos pero, este jueves, evitaron cualquier tipo de sorpresa desde el inicio gracias a una espectacular actuación de Durant.
El ex de los Oklahoma City Thunder, criticado tras ser expulsado en el primer partido por dos técnicas y en el segundo por seis faltas, se echó a su equipo a la espalda y ya sumaba 27 tantos al descanso luego de haber firmado 12 en el primer cuarto con una inmaculada serie de 5/5 en el tiro.
Así, los Warriors se marcharon al descanso 21 arriba (73-52) y nunca bajaron el ritmo con 38 unidades en 29 minutos de Durant.
Stephen Curry contribuyó con 21, Klay Thompson con 12 y Andre Iguodala con 15 desde el banquillo.
Ahora, Golden State, con el factor cancha de nuevo de su lado, intentará dejar la serie casi sentenciada el domingo en el cuarto encuentro, de nuevo en Los Ángeles.
– Adiós a los fantasmas –
En Brooklyn, Simmons espantó a sus particulares fantasmas y dio el triunfo a los visitantes ante los Nets.
El australiano, criticado tras el segundo partido por uno de sus rivales, se reivindicó con 31 puntos -15 de ellos en el último cuarto- y repartió nueve asistencias para recuperar el factor cancha.
«Simmons es un gran jugador en transición pero en media cancha es un jugador normal», había dicho en la previa el alero de los Nets Jared Dudley.
El armador, con esa frase en mente, brilló desde el inicio, se mostró decisivo en la organización y sentenció el encuentro con 15 tantos en los últimos 12 minutos.
Tobias Harris contribuyó con 29 unidades (6/6 en triples) y 16 capturas, J.J. Redick con 26 puntos, y Jimmy Butler con otros 16 para que los visitantes no echaran en falta a un Joel Embiid que fue baja con molestias en su rodilla izquierda.
«Ha sido una gran victoria para nosotros. Hemos hecho nuestro juego, hemos jugado duro», dijo Harris tras el choque.
– White defiende el fortín –
En el otro encuentro de la jornada, el base de segundo año Derrick White, con 36 puntos, guió el triunfo de los Spurs 118-108 ante los Denver Nuggets. San Antonio se queda así 2-1 en la eliminatoria.
White, que ya sumaba 26 tantos al descanso, disputó el mejor partido de su corta carrera y amplió a 14 las derrotas consecutivas de los Nuggets en el feudo de los Spurs.
«Ha sido una gran victoria para nosotros. Quería salir ahí fuera y ser agresivo y lo he conseguido», dijo el protagonista tras el choque.
Los texanos habían sido el segundo mejor equipo en casa durante la temporada regular, con un balance de 32-9, solo por detrás de los Milwaukee Bucks (33-8).
Tras arañar el primer juego en Colorado y estar a punto de ganar también el segundo como visitantes, los Spurs regresaron al AT&T Center y rápidamente tomaron las riendas del partido.
Sin embargo, un parcial de 16-0 en los tres primeros minutos del segundo cuarto otorgó a los visitantes una ventaja máxima de 10 unidades, que White se encargó en reducir hasta los tres al descanso (61-58).
Así, la igualdad continuó durante el tercer periodo hasta que un nuevo arreón de 15-2 en el último cuarto terminó desnivelando la balanza para los locales, que llegarán al cuarto encuentro de la serie, el sábado, con la tranquilidad de haber logrado el primer punto en casa.