Los resultados de la autopsia realizada a Altagracia Díaz, la mujer que murió recientemente en el Centro Internacional de Cirugía Plástica Avanzada (CIPLA) , confirman que hubo una intervención quirúrgica y que la mujer, de 51 años de edad, murió por un embolismo graso a nivel pulmonar, que la literatura médica describe como la obstrucción de los vasos sanguíneos por glóbulos de grasa.
Así afirmó el Ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas, quien dijo que el próximo lunes dará el informe completo sobre lo que sucedió con la paciente y las medidas que se tomarán respecto a la clínica de estética y el personal de salud involucrado.
Adelantó en declaraciones a la periodista Lisania Batista de Diario Libre, que en la clínica funcionan 12 quirófanos, pero está habilitada para cuatro.
Aseguró que la comisión que estudió el caso de Díaz, investiga otras denuncias de supuestas malas prácticas médicas relacionadas con intervenciones de cirugías y tratamientos estéticos y garantizó que desde el Ministerio actuarán con responsabilidad para evitar que ocurran hechos lamentables.
Dijo que se reunirá con la Sociedad de Cirugía Plástica, para establecer las modificaciones protocolares y el endurecimiento de las medidas que intervienen en la especialidad.
El informe preliminar de la comisión investigadora recomienda aumentar las certificaciones y acreditaciones con un mayor rigor técnico.