“Durante las últimas 24 horas he estado siendo amenazada con mis propios desnudos. Me siento sucia, me siento observada, siento que alguien me ha quitado algo que solo quería que viera una persona especial”.

Con estas palabras la actriz Bella Thorne denunciaba en un comunicado publicado en su cuenta de Twitter el hackeo de fotos sexuales del que ha sido víctima. La exchica Disney acompañaba un tuit en el que podía leerse “Que te jodan a ti y al poder que crees que tienes sobre mí” con varias de las imágenes que habían sido robadas de su teléfono móvil y en las que posa desnuda de cintura para arriba.

Junto a las fotos, Thorne ha explicado que el FBI está trabajando en dar con la identidad del pirata informático y las razones por las que ha preferido ser ella quien hiciera públicas las fotografías íntimas. “Durante demasiado tiempo, dejé que un hombre se aprovechara de mí una y otra vez y estoy harta. Publico esto porque ahora es mi decisión […] Dormiré mejor sabiendo que recuperé mi poder. No puedes controlar mi vida, nunca lo harás”.

La actriz, que también ha publicado varios libros, asegura que tratará esta cuestión en su próxima publicación y quiere empoderar a otras mujeres con su decisión. De hecho, no es la primera vez que la protagonista de Shake it Up hace público haber sido víctima de abusos sexuales.

Cuando estalló el escándalo de agresiones perpetradas por el productor Harvey Weinstein, Thorne confesó que había sufrido abusos “desde que tiene uso de razón”. En aquella ocasión también utilizó las redes sociales para denunciar su experiencia y visibilizarla.

“Abusaron de mí sexual y psicológicamente desde que recuerdo hasta que cumplí 14… cuando por fin tuve el coraje de cerrar mi puerta por la noche y sentarme a esperar. Toda la maldita noche.

Esperando a que alguien se aprovechara de mí otra vez. Una y otra vez esperé para detenerlo y finalmente lo hice”, escribió en Instagram, donde acumula casi 20 millones de seguidores.

La actriz y cantante de 22 años, que empezó su carrera en los medios con solo seis semanas y protagonizó varias campañas publicitarias durante la infancia hasta terminar en la factoría Disney, ha animado en varias ocasiones a las víctimas de abusos sexuales a denunciar (incluso algunos de sus fans han compartido sus testimonios a raíz de sus publicaciones) y ha aprovechado sus influencia mediática para enviar fuerza a todas las mujeres que hayan pasado por una situación similar.

Thorne se suma a la larga lista de celebrities que han sido víctimas del pirateo de sus teléfonos móviles. Scarlett Johansson, Jennifer Lawrence, Kate Upton, Anne Hathaway, Ariana Grande o Kirsten Dunst son solo algunos de los nombres que han visto cómo sus imágenes privadas salían a la luz sin su consentimiento (tal y como explica el reportaje Redes sociales: cuando compartir es humillar distribuir este tipo de imágenes es delito). Ella ha decidido tomar el control de sus propios desnudos y hacerlos públicos poniendo punto y final al chantaje.

Via Smoda.elpais.com