Instagram está probando una nueva función para impedir que los piratas cibernéticos secuestren cuentas de «alto perfil» con las que luego puedan pedir algún tipo de «rescate».
Un caso de lo expuesto en el párrafo anterior lo sufrió la actriz Bella Thorne, a quien hackearon su cuenta de Instagram y amenzaron con publicar sus fotos íntimas si no daba cierta cantidad de dinero virtual.
Sin embargo, la intérprete de series como Shake It Up y Scream no se acobardó, y a pesar de que las imágenes eran bastante comprometedoras, decidió publicarlas ella misma en su cuenta de Twitter para no sentirse humillada ni controlada por alguien más.
Sin embargo, según un reporte de Motherboard, su caso fue uno entre muchos. Los piratas cibernéticos suelen enfocarse en cuentas de influencers para amenzar con borrarlas, a menos que sus dueños paguen un rescate.
De acuerdo con Vice, en algunos casos las vícitmas han tenido que pagar más de USD 100 en criptomonedas para poder recuperar sus cuentas, que en muchos casos tienen más de 50 mil seguidores.
En otros casos, los ciberdelincuentes negocian con cuentas que tienen muchos seguidores y las venden por hasta USD 100.000, según reportó The Atlantic.
El método más común para este tipo de ataque es a través de phishing (robo de información personal a través de una fuente fraudulenta, como un sitio falso, por ejemplo).
Por esta razón la aplicación anunció la implementación de una nueva modalidad para impedir este tipo de situaciones.
«Sabemos que perder el acceso a tu cuenta puede ser una experiencia angustiosa. Hemos implementado medidas para evitar, en primer lugar, que las cuentas sean hackeadas», informó Instagram en un comunicado.
Código de seis dígitos
El primer paso del nuevo método consiste en una serie de datos que pedirá la aplicación (correo electrónico, número telefónico) para verificar la identidad.
Luego, Instagram mandará un código de seis dígitos que únicamente llegará al dispositivo que hayamos seleccionado.
