SANTO DOMINGO.- El salsero Jerry Rivera inició la celebración de sus 30 años de carrera en República Dominicana durante su concierto “De lujo” la noche de este sábado en el Teatro la Fiesta del hotel Jaragua.
Vestido de pantalón blanco, camisa y chaqueta negra subió el artista a escena a las 11:20 de la noche, tras la presentación del comunicador Daniel Sarcos, y la proyección de un video que rememoraba parte de su carrera artística.
Con un popurrí de los temas: “Dime tu”, “Esa niña” y “Nada sin ti”, inició el repertorio de 22 canciones que preparó el cantante para los dominicanos que desde el inicio del show aprovecharon cualquier espacio para bailar.
El público disfrutó de un artista que se mostró muy interactivo, haciendo historias, chistes, y ofreciendo uno que otros consejos.
“Lo triste no es estar solo; es estar acompañado y sentirse solo”, expresó al concluir su famosa canción, “Ese”.
Jerry Rivera viajó a República Dominicana con su orquesta de 11 músicos en tarima, dos bailarines que eran también coristas, más el sonidista; para ofrecer un espectáculo de primera que organizó la empresa Sarcos-Ledezma de los empresarios Daniel Sarcos y Javier Ledezma, quienes buscan renovar la forma de hacer entretenimiento en el país, al lograr mejores experiencias entre el público, combinando calidad y buenos precios.
Durante una hora y 45 minutos no faltaron temas como: “Cara de niño”, “Me estoy enamorando”, “Cuenta conmigo”, “Vuela muy alto”, algunos de ellos presentados en un mix de varios temas musicales.
Un momento emocionante fue cuando Jerry Rivera rindió homenaje al que considera según dijo, el “papá de la salsa”, Frankie Ruiz, un gran artista de su país, Puerto Rico, que fue inspiración
para él, así lo definió.
En honor al fenecido salsero, interpretó con la compañía del público: “La cura” “Desnúdate mujer” y “Mi libertad”.
Rivera cantó sin parar, sin cambios de ropa y al llegar a la última parte de su selección musical faltando minutos para la una de la madrugada, recitó sus últimas canciones, “Qué hay de malo” y “Amores como el nuestro”, ahí aprovechó con la bandera dominicana en pantalla grande y palabras de agradecimiento; para mencionar que en este mes celebra sus 30 años de carrera, por lo que recordó que se está “poniendo viejo”.
“Este mes cumplo 30 años de carrera, ¡Dios mío!… me estoy poniendo viejito, pero, -tengo alma de niño-, y eso es lo importante.
Les deseo lo mejor, gracias a ustedes por bendecirme, ya ustedes son bendecidos. Qué Dios me les dé mucha paz, amor y alegría”, concluyó para luego retirarse del escenario, dejando a un público ávido de más canciones.
