El propietario del club nocturno Doll House fue condenado anoche a seis años de prisión por trata de personas y por explotar sexualmente a varias mujeres que eran traídas al país desde Venezuela, Colombia y otros países.

La sentencia, emitida por las juezas del Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, ordena que Rafael Elías Alcántara, propietario del club, cumpla la condena en cárcel de La Victoria.

Sin embargo, el mismo tribunal favoreció con un perdón judicial a Laura Damisela Batista, y además absolvió a Santos Benjamín Rodríguez, quienes eran acusados de formar parte de la red criminal.



Elías Alcántara fue acusado como el principal cabecilla de la red criminal y se le atribuye viajar al exterior para captar a las mujeres.

Según la acusación, el propietario del Doll House viajaba a Colombia y a otros países a participar del proceso de captación de las mujeres a las que explotaría sexualmente. Las mujeres las traían desde Colombia, Venezuela, Perú, Estados Unidos, España, Brasil, Ucrania y de la República de Bielorrusia.



Describe la acusación que una vez las mujeres llegaban al país, permanecían en una casa ubicada en la calle Belisario Curie, en el sector Los Restauradores del Distrito Nacional, desde donde eran llevadas diariamente al Doll House en la George Washington a realizar bailes eróticos y sostener relaciones sexuales con los clientes.

Detalla el Diario Libre que presuntamente Alcántara tenía en su poder y suministraba a sus empleados armas para mantener el control de las propiedades que se encontraban bajo el control y dominio del grupo delictivo.

Se indicó que las mujeres no eran quienes recibían el dinero, sino que los pagos se hacían con tarjeta de crédito internacional y los fondos se dirigían a una cuenta de Elías Alcántara, en Estados Unidos.