Sabemos que la mayoría de las personas tienen algunas percepciones inexactas de Jesucristo, lo cual también ocurre en la Iglesia actual. Una encuesta llamada “El estado de la teología” preguntó a los cristianos evangélicos acerca de sus creencias, y las respuestas fueron una mezcla de verdad y error. Por ejemplo, el 97% tiene la creencia de que hay un Dios verdadero en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu. Sin embargo, el 78% cree erróneamente que Cristo es el primer y más grande ser creado por Dios.

Nuestra salvación depende de seguir a quien el Padre celestial envió para redimirnos. Por tanto, debemos estar seguros de que confiamos en el único y verdadero Salvador, tal como Él se ha identificado en la Biblia. En el pasaje de hoy, el apóstol Juan lo describe como “el Verbo” y enumera cinco atributos:



CRISTO ES ETERNO. “En el principio era el Verbo” (Jn 1.1). Él no comenzó a existir al ser concebido, pues existía antes del comienzo del tiempo.

ÉL ES DIOS. “El Verbo era Dios” (Jn 1.1). Él siempre ha sido y nunca dejará de ser divino.



ÉL ESTÁ CON DIOS (Jn 1.1, 2). El Hijo y el Padre, junto con el Espíritu Santo, han existido siempre como personas separadas, siendo un solo Dios en naturaleza.

EL SEÑOR JESÚS ES EL CREADOR. “Todas las cosas por Él fueron hechas” (Jn 1.3). De hecho, nada llegó a existir sin Él.

EN ÉL ESTÁ LA VIDA (Jn 1.4). Cristo es la fuente de toda vida, tanto temporal como eterna.

¿Es este el Redentor en el que ha confiado para salvación? Aunque Él se hizo hombre, nunca debemos dejar de reconocerlo y adorarlo como el Hijo de Dios.

Fuente Encontacto.org