Washington amenaza con tasar fuertemente una serie de productos franceses como vinos espumosos, quesos y bolsos en respuesta a la imposición en Francia de una tasa sobre los servicios digitales, una decisión que París calificó este martes de «inaceptable» al tiempo que afirmó esperar una «fuerte respuesta» europea.
«El proyecto, que podría aplicarse de aquí a 30 días, de nuevas sanciones contra Francia es inaceptable», afirmó el ministro de Economía Bruno Le Maire en declaraciones a Radio Classique.
«No es el comportamiento que esperamos de Estados Unidos frente a uno de sus principales aliados, Francia, y de manera general Europa», agregó.
El anuncio de las autoridades estadounidenses el lunes a última hora del día es consecuencia de una investigación abierta en julio del año pasado por el Representante de Comercio de Estados Unidos (USTR), Robert Lighthizer, que concluyó que la tasa francesa castiga a empresas tecnológicas estadounidenses como Google, Apple, Facebook y Amazon.
«La USTR se compromete a luchar contra el proteccionismo creciente de los Estados miembros de la Unión Europea, que apuntan injustamente a las empresas estadounidenses», dijo el representante en un comunicado.
La propuesta de la USTR, que todavía tiene que recibir el aval del presidente estadounidense Donald Trump, podría intensificar las fricciones con la Unión Europea (UE), y con Francia en particular.
El gobierno francés tomó contacto el lunes con la nueva Comisión Europea para hablar de la reacción de Bruselas frente a las amenazas de la administración Trump y «cerciorarse de que en el caso de nuevas sanciones estadounidenses habrá una respuesta europea, una respuesta fuerte», declaró Le Maire.
– «Justicia fiscal»
El lunes, antes del anuncio de Estados Unidos, Le Maire ya había afirmado que «nunca» renunciará a su tasa sobre los gigantes digitales, reprochando a Estados Unidos que no quería un gran acuerdo internacional sobre la fiscalidad del digital.
El ministro pidió este martes de nuevo un acuerdo mundial al amparo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). «Ahora esperamos la respuesta estadounidense», señaló.
«No tenemos por qué retroceder en relación a un tema que económicamente tiene sentido y que es de justicia fiscal», insistió por su parte la secretaria de estado francesa de Economía Agnès Pannier-Runacher, que recordó que esa tasa «no está dirigida contra las plataformas numéricas estadounidenses», sino que se aplica igualmente a las plataformas francesas.
Las nuevas amenazas de Washington tienen lugar justo antes de un encuentro bilateral entre Donald Trump y el presidente francés Emmanuel Macron, previsto este martes a las 14H00 GMT en el marco de la cumbre de la OTAN que se celebra en Londres.
«El informe de la USTR envía una señal clara a Francia, y advierte a los países que están concluyendo medidas similares que no se tolerarán tasas discriminatorias», reaccionó Matt Schruers, director ejecutivo de la federación de la industria de la informática y las comunicaciones.
Washington advirtió, además, que está considerando extender su investigación a medidas similares aplicadas en Austria, Italia y Turquía.
Entre los productos a los que Estados Unidos amenazó con imponer aranceles de hasta 100% por valor de 2.400 millones de dólares se encuentran productos cosméticos, la porcelana, el jabón, los bolsos, la mantequilla y muchas clases de quesos, incluidos el Roquefort, el Edam y el Gruyere.
La administración Trump parece por ahora querer excluir de sus medidas al vino tradicional, uno de los productos de exportación más emblemático de Francia, que, no obstante, se encuentra ya en el marco de represalias estadounidenses por otro litigio comercial sobre las subvenciones europeas a Airbus.
La imposición de tarifas aduaneras a los productos franceses no podrá llevarse a cabo antes de mediados de enero, tras un periodo de consulta para examinar eventuales demandas de exenciones.
– Negociaciones en la OCDE –
La tasa francesa a los servicios digitales, conocida como «Gafa» (por las iniciales de Google, Apple, Facebook y Amazon), fue promulgada este año e impone un gravamen de cerca de 3% al volumen de negocios de compañías tecnológicas en Francia, que suele proceder de la publicidad en línea y la venta de datos con fines publicitarios.
El impuesto afecta a compañías que obtienen ingresos anuales de al menos 750 millones de euros (unos 830 millones de dólares) en sus actividades digitales mundiales.
La tasa francesa se aplica a los ingresos y no a los beneficios, que los gigantes tecnológicos suelen declarar en países con bajos impuestos como Irlanda, una práctica que cada vez irrita más a los gobiernos en Europa.
El mes pasado, el encuentro de ministros del G20 en Washington abrió el debate sobre un sistema internacional para tasar a las multinacionales tecnológicas que la OCDE espera ver entrar en vigor en junio, y que es considerado un desafío clave para adaptar la fiscalidad mundial a la digitalización de la economía.
Fuente: AFP