La película Figuras ocultas, puso al descubierto -para una nueva generación- el importante rol de Katherine Johnson para que el primer viaje del hombre a la Luna fuese una realidad. La matemática que calculó las trayectorias que permitieron aterrizar a los tripulantes del ‘Apolo XI’ después de que Neil Armstrong y ‘Buzz’ Aldrin hubieran pisado la Luna, ha fallecido este lunes en su casa a los 101 años.

Johnson, junto a las de otras afroamericanas cuyo trabajo en la Nasa fue obviado durante décadas, vivió sus últimos años entre reconocimientos mundiales, incluidos los de su organización y el Gobierno de Estados Unidos. Obama la galardonó con la Medalla de la Libertad y fue considerada un ejemplo para volver a impulsar el papel de las mujeres en la ciencia y la tecnología.



Este lunes, el director de la Nasa, Jim Bridestine, la despedía con honores, en un comunicado en el que la honraba como “una líder de los días pioneros” y recordaba cómo “amplió las fronteras del espacio e hizo grandes avances que abrieron puertas para mujeres y personas de color en la universal búsqueda humana para explorar el espacio”.

“La Nasa nunca olvidará su entusiasmo y liderazgo, y las metas que no habríamos podido lograr sin ella”, afirma la nota, una de las más entusiastas de los últimos tiempos.