Tener un vaso o una botella de agua en nuestra mesita de noche no es una buena idea, debido a que podría ser perjudicial para nuestra salud. Veamos la razón que los expertos nos dan a través de sus estudios científicos.
Seguramente beber agua durante la noche no es una mala idea, dado que durante la noche, nuestro cuerpo tiende a deshidratarse. Es precisamente en el despertar nocturno cuando nuestro cuerpo requiere dos cosas fundamentales: la primera es vaciar la vejiga de los líquidos acumulados durante el día y la segunda es rehidratarse.
¿Qué hacemos entonces? Instintivamente bebemos el agua que tenemos en vaso o en botella en nuestra mesa de noche.
Aquí está el error!
Según una investigación realizada por el Dr. Kellogg Schwab, director del Johns Hopkins University Water Institute, el vaso de agua que está sobre nuestra mesita de noche está cargado con una cantidad excesiva de bacterias que entrarán en nuestro cuerpo alterando la flora bacteriana intestinal. Otro ejemplo citado por el Dr. Schwab es el de las botellas de plástico dejadas en los automóviles y sometidas a diferentes temperaturas. El plástico de las botellas o de los biberones que contienen una sustancia química llamada BPA, son tóxicas para el cuerpo humano.
La solución es el vidrio, mucho más higiénico y sostenible: las botellas se pueden lavar incluso a altas temperaturas. Por lo tanto, mantener una botella de vidrio tapada al lado de la cama puede ser una buena idea: sin embargo, el agua del interior debe reemplazarse con frecuencia. Como alternativa, siempre puede optar por un paseo por la cocina y agua fresca del grifo!