Estados Unidos está lejos de estar preparado para levantar el confinamiento en el país, advierte en una entrevista Tom Frieden, exdirector de los Centros Estadounidenses para la Prevención y Control de Enfermedades (CDC) durante la presidencia de Barack Obama.

Frieden dirige ahora la ONG Resolve to Save Lives e hizo estos comentarios antes de que el jueves el presidente Donald Trump presente su plan para reabrir la economía estadounidense.



PREGUNTA: ¿Cómo será el verano para los estadounidenses?

La clave es bloquear el virus por todos los lados, es decir (con) cuatro cosas: la capacidad de realizar pruebas, el aislamiento de todas las personas infectadas, un programa vigoroso y amplio de trazabilidad de contacto y cuarentenas seguras y cómodas para todos aquellos que han estado expuestos.



Si somos capaces de hacer esas cuatro cosas, podremos contener el virus.

Es inapropiado enfocarse en una fecha, en lugar de en lograr estas cuatro cosas. Debemos aprovechar el momento en que estamos encerrados en casa para prepararnos.

P: Dijo que muchas pruebas aprobadas por la Agencia de Medicamentos (FDA) para la covid-19 eran «basura», ¿por qué están autorizadas?

La FDA aún no ha encontrado el punto de equilibrio adecuado para su homologación.

Producir buenas pruebas serológicas (en busca de anticuerpos, ndlr) no es fácil, debe hacerse con rigor. Y básicamente, no sabemos si los anticuerpos realmente estarán asociados con la inmunidad. Y si es así, ¿por cuánto tiempo?

Todavía no sabemos mucho sobre este virus. No es erradicable, no podemos eliminarlo.

Lo que China ha hecho puede enseñarnos mucho. Han sido extraordinariamente proactivos. Admiten que hay casos asintomáticos. Hacen muchas pruebas, incluidos a contactos y personas en cuarentena, y descubren los casos asintomáticos.

Cuando descubren un caso pero ignoran la fuente de contaminación, regresan a esta persona para encontrar los casos asintomáticos.

P: ¿Estados Unidos está equipado para el próximo período?

El nivel de mano de obra requerido será extraordinariamente alto.

Estamos hablando de rastrear contactos con aplicaciones y teléfonos, soy escéptico, no estoy seguro de que funcione. Pero estas herramientas deben usarse para ayudar a los «rastreadores de contactos».

Pero requerirá muchos más trabajadores que en la actualidad. Si toma la misma proporción que en Wuhan, se necesitarán alrededor de 300.000 personas.

Su trabajo será un regreso a los principios básicos de la salud pública: hablar con las personas, tratar a los pacientes como si fueran personas VIP, ganarse su confianza, ayudarlos a recordar, todo para advertir a las otras personas.