¡Llamamiento a todos los estudiantes! Existe un truco para aprobar los exámenes tipo test. Sí, esos odiosos formatos de examen que inducen a confusión, especialmente cuando llegas a la respuesta D para encontrarte con que el profesor ha decidido sorprenderte con la maravillosa opción “todas las anteriores son correctas”. Eso si, no hay nada peor que bajar un poco más la mirada y ver que también hay una opción E: “todas las anteriores son falsas”.
Por si esto fuera poco, logran complicar más los tipos test avisándote de que pienses bien qué opción elegir ya que las respuestas incorrectas restan. No obstante, por muchas trampas que tenga un examen no hay que darlo todo por perdido; como decíamos antes, afortunadamente hay una sencilla técnica para aprobar un tipo test.
La plataforma de recursos educativos para estudiantes y profesores, carlospes.com, ha revelado cómo aprobar un examen tipo test, ya sea para alumnos cursando bachillerato, estudios superiores o preparándose para una oposición.
La clave para aprobar un tipo test no solo está en la respuesta que elijas, sino en cuántas elijas. Veamos cómo funciona para los distintos tipos de exámenes:
Ejemplo 1
Pongamos que tienes un tipo test que consiste de 20 preguntas; cada respuesta correcta suma 0,5 puntos y cada respuesta incorrecta resta 0,125, mientras que las respuestas en blanco no puntúan. Si este es el caso siempre debes responder o bien a 15 preguntas o a 20, nunca otro número. Es decir: no respondas un número de preguntas superior a 15, y tampoco a 16, 17, 18 o 19; es o 15 o 20. Veamos por qué:
De lo que no cabe duda es de que hay que responder a 10 para aprobar, ya que 0,5 x 10 equivale a 5, que sería el aprobado.
Eso si , tienes muy poco margen de error si solo respondes a 10, ya que con fallar una estás suspenso. Lo mismo ocurre si respondes a 11 preguntas: 10 bien x 0,5 equivale a 5, y si le restamos un 0,125 por una respuesta incorrecta tendrías un 4,875; es decir, estás suspenso.
Por lo tanto, partimos de que tienes que responder mínimo a 12 preguntas para entrar en terreno más o menos seguro. La cosa está en que es mejor contestar a 15 preguntas que a 14, 13 o 12. Te explicamos por qué:
Cada vez puedes fallar más preguntas; si respondes a 12 puedes permitirte fallar una pregunta; si respondes a 13 puedes fallar 2; y si respondes a 14 puedes fallar 3. En cambio, si respondes a 15 puedes fallar 4:
Con 15 preguntas: 11 bien x 0,5 equivale a 5,5; 4 respuestas mal x 0,125 equivale a 0,5. 5,5 menos 0,5 nos da un 5, un aprobado raspado.
¿Pero, entonces por esta regla por qué no nos conviene responder a 16, 17, 18 o 19? Ocurre lo mismo con los cálculos que hemos hecho antes. En todos casos necesitas tener al menos 12 respuestas correctas, pero puedes fallar más a medida que aumentan las preguntas respondidas.
Además resulta absurdo contestar a 16 preguntas en vez de 20, ya que si ya tenemos 15 y estamos aprobados puedes correr el riesgo de suspender por contestar a una pregunta más.
Puedes calcular el número de preguntas a responder para tener un aprobado más seguro para todo tipo de exámenes tipo test, independientemente del formato, usando esta fórmula:
Divide entre 2 el número total de preguntas (N) y súmale 1, más el número de preguntas que mal respondidas restan una bien:
(N/2) + 1 +1 = número óptimo de preguntas a las que responder
En este caso: (20/2) +1 + 4 (número de preguntas que respondidas mal restan una bien) = 15.
15 es el primer número óptimo de preguntas que debemos responder para aprobar, pero hay más. Podemos obtenerlos sumando 1 + r al número óptimo:
1 +4 + 15 = 20
En este caso el único otro número óptimo sería 20.
Pongamos la fórmula en práctica con otro ejemplo.
Ejemplo 2
Probemos si funcionaría el truco para aprobar un examen tipo test de oposición. Generalmente suelen tener 100 preguntas, cada pregunta bien suma 0,1 y cada respuesta mal resta la tercera parte, es decir, 0,033.
(100(número total de preguntas) /2) + 1 + 3 (número de preguntas incorrectas que restarían una pregunta correcta) = 54.
Es decir, el número óptimo a responder son 54. Podemos obtener el resto de números óptimos a responder sumando 1+3: 58, 62, 66, 70, etc.
Hagámoslo una última vez.
Ejemplo 3
Imaginemos que tenemos un examen tipo test de 40 preguntas en el que cada pregunta correcta suma 0,25 y cada pregunta incorrecta resta la quinta parte, 0,05.
(40/2) +1 + 5= 26; 1+ 5 + 26= 32; 1 + 5 + 32= 38.
Las preguntas óptimas a las que responder serían 26, 32 o 38 e este caso.
Bueno y un último truco infalible…estudiar e ir bien preparado al examen. ¡Mucha suerte!
Visto en Ticbeat