Los nacimientos en Estados Unidos alcanzaron su nivel más bajo en tres décadas y media el año pasado, anunciaron el miércoles funcionarios estadounidenses, parte de una «caída de bebés» en curso que no se prevé que mejore en medio de la pandemia del coronavirus.

Unos 3,75 millones de bebés nacieron en 2019 en el país, un 1% menos que el año anterior y el número más bajo desde 1985, según el Centro Nacional de Estadísticas de Salud (NCHS por su sigla en inglés).



La tasa de natalidad en Estados Unidos ha disminuido principalmente después de la crisis de 2008. Los expertos indican que los períodos de declive económico hacen que las parejas se tomen una pausa antes de procrear.

Con más de 30 millones de empleos destruidos, al menos temporalmente, por la paralización de actividades para evitar la propagación de la COVID-19, la generación del Milenio, que alcanzó la mayoría de edad durante la Gran Recesión y que ahora está en el momento reproductivo pico, puede retrasar el comienzo o la expansión de una familia.



Según el informe, las tasas de natalidad en 2019 disminuyeron para casi todos los grupos de mujeres menores de 35 años, pero aumentaron para las de 40 años. Mientras tanto, la tasa de natalidad para adolescentes de 15 a 19 años disminuyó en un 5%.

La reducción de la tasa de natalidad es opuesta a lo que ocurrió en los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial, un período en el que Estados Unidos disfrutó de una considerable prosperidad económica.

Los que regresaron de la guerra generaron un estallido de nacimientos, lo cual dio lugar a los «baby boomers», como se conoce a los nacidos entre 1946 y mediados de la década de 1960.

Las nuevas cifras publicadas el miércoles representaron el quinto año desde 2014 que la cantidad de nacimientos en Estados Unidos ha disminuido.

Los datos también mostraron que la tasa de fertilidad total, o el número de nacimientos que una mujer típica tendría durante su vida, cayó a 1,7.