Por fin este sábado la Crew Dragon de SpaceX partió con éxito hacia la Estación Espacial Internacional, donde sus dos tripulantes se encuentran ya trabajando justo al resto de astronautas que se habían desplazado previamente hasta allí. En la cápsula viajaron ellos dos, pero también un simpático dinosaurio de peluche, que la compañía ya ha puesto en venta a través de su página web. Finalmente ese fue el último tripulante extra de la misión. No obstante, hubo otro que ya en el primer intento parecía estar dispuesto a volar con ellos: un caimán en la plataforma de lanzamiento.

El animal se desplazó hasta allí el miércoles, poco antes de que tuviera lugar el lanzamiento que finalmente se canceló a causa del mal tiempo. Los trabajadores del Centro Espacial Kennedy (KSC) llamaron a un experto en reptiles, que se desplazó hasta allí para llevarse al animal; que, por supuesto, no sufrió ningún daño.



No es la primera vez que hallan a uno de estos reptiles en las inmediaciones. Sin embargo, nunca lo hicieron en un momento tan señalado como este. Está claro que el caimán también quería hacer historia.

Ya estaba todo preparado para el que inicialmente iba a ser uno de los días más importantes de la trayectoria de SpaceX cuando algunos de los trabajadores desplazados hasta el KSC vieron un caimán en la plataforma de lanzamiento.



Al parecer, el animal había entrado por la puerta de seguridad y se había desplazado hasta el lugar desde el que partiría el Falcon 9. En todo momento se mostró tranquilo, tanto durante su paseo como cuando Robb se acercó hasta él para sacarlo de allí. No fue difícil capturarlo con ayuda de una cuerda y subirlo luego a un camión que lo llevaría de vuelta a casa. ¿Pero dónde estaba su casa?

Con información de Hipertextual