Según el último informe demográfico de las Naciones Unidas del 2019 nuestro planeta alberga una población de 7,700 millones de seres humanos dotados con algún nombre que los indentifica. Los nuevos tiempos y la conformación de las naciones han hecho posible en gran medida llevar registros de sus habitantes con sus nombres y apellidos, pero no siempre fue así.
Cuenta la leyenda que la costumbre de llevar apellido surgió en China por el año 2,850 AC y en el continente europeo la historia se remonta a la Edad Media al formarse ciudades más grandes y feudos con mayores poblaciones haciéndose necesario diferenciar mejor a las personas. También la burguesía comenzó a tener inmuebles lo que hizo necesario definir con mayor precisión a quién pertenecía cada cosa causas que dieron origen a los apellidos.
Inicialmente se le identificaban con el lugar, ciudad, características o referencia de donde vivían. Ejemplo los apellidos; Del Valle, Del Monte, Rivera, Peña, Arroyo, Canales, Cuevas, Prado, Rivera, Torres, Fuentes, Iglesias, Palacios, Toledo, Ávila, Logroño, etc. Todos esos apellidos son de origen español.
Otro tipo de apellidos que hacen referencia a su padre, los hijos de, terminados en EZ, como Fernández; hijo de Fernando, Domínguez; hijo de Domingo, Hernández; hijo de Hernando, etc.
Hay apellidos que se originan de alguna peculiaridad arquitectónica con la que se relacionaba una persona, como Torres, Fuentes, Iglesia, Puente y Palacios
También existen los que hacen alusión a una ocupación, por ejemplo si fabricaba zapatos, se le identificaba Zapatero, si criaba corderos; Cordero , si criaba ganado; Toro, Vaquero, si cultivaba manzanas; Manzanero, si era agricultor; Labrador, si era soldado; Guerrero, si era minero; Roca, etc.
De la misma manera hay otros apellidos que responden a alguna característica física distintiva de la persona tal como; Blanco, Delgado, Cabello, Calvo, Rubio, Moreno, Alegre, Cortes, Cabezón, entre otros tantos.
La historia y evolución del hombre han ido labrando nuestra cultura y lo que somos hoy, siendo el origen de los apellidos una muestra más del ingenio humano y su espíritu de pertenencia.
Por: Alberto Taveras
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