El director del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie), René Jáquez Gil, atribuyó los retrasos en el pago a los suplidores de los kits alimenticios de la Jornada Extendida a dificultades en el pago de los impuestos, en ciertos los casos, y la falta algunos requisitos de las empresas en la Contraloría General de la República.
En horas de la mañana de este miércoles un grupo de suplidores de diferentes provincias del país detuvo el tránsito frente a la sede del Inabie, en la avenida 27 de febrero, en reclamo de que Jáquez Gil honre una deuda con más de mil suplidores, cuyo monto asciende a unos cinco mil millones de pesos, según explicaron.
Al conversar con reporteros de Diario Libre, Jáquez Gil explicó que la institución que dirige ha estado realizando sus pagos de manera normal, un promedio de 1,600 millones por mes, y que los suplidores que no lo han recibido es porque tienen una “debilidad para el pago”.
“El Inabie genera un libramiento (orden de pago), ese libramiento pasa a la Contraloría de la República, la Contraloría valida que el pago ha sido correcto, o sea, que el suplidor cumple con todos los procedimientos requeridos… entonces cuando Contraloría valida que el pago fue correcto, entonces pasa a Tesorería autorizando a desembolsarle a ese suplidor”, expuso Jáquez.
“Cuando una gente tiene un retraso grande es porque tiene una debilidad para el pago, porque hay gente que no le debemos ni un centavo, si usted vio la protesta de hoy, había 19 suplidores, nuestra institución tiene 1,721 suplidores”, agregó el director del Inabie.
Afirmó que la mayoría de los suplidores está recibiendo su pago, sin embargo, hay una parte de ellos que tienen dificultad con el pago de impuestos, lo cual podría ser la razón por la que no han recibido su retribución.
Preguntado sobre si es este el caso de los suplidores que protestaron la mañana de hoy, el funcionario manifestó que no conoce los casos específicos.
“Lo que hay es ansiedad porque va haber un cambio de Gobierno, porque aquí donde yo estoy, en cuatro o cinco días va haber otra persona sentada… lo que le quiero decir a los suplidores, es que el hecho de que haya cambio de dirección de la institución no puede significar que la institución no siga desarrollando sus procesos de pago normal”, expresó Jáquez Gil.
Agregó que se supone que las nuevas autoridades van a dar continuidad a los compromisos contraídos por la gestión saliente. “Le quiero decir a los suplidores que las autoridades nuevas deberán venir con el respeto a las normas de pago establecidas por el sistema de gestión financiera del Estado”, consideró.
El funcionario expuso que los suplidores pueden acceder a la oficina virtual del Inabie y verificar en qué estado se encuentra su libramiento u orden de pago, para conocer cuál es la situación real de esos procesos.
Dijo que se reunirá con siete asociaciones de suplidores para conocer todas sus inquietudes y poder pasárselas a la comisión de transición de las nuevas autoridades.
Jáquez Gil dijo que la entidad estará emitiendo órdenes de pago hasta este viernes 14 de agosto, por lo que el pago a los suplidores que faltan por cobrar quedará pendiente para la próxima gestión.
Jenny Gómez, suplidora de almuerzo escolar de la Tanda Extendida, explicó que el Inabie adeuda alrededor de cinco mil millones de pesos a los suplidores, y que el motivo de la protesta es que el director de la entidad, René Jáquez Gil, dijo en una entrevista que entregará la institución a las nuevas autoridades con una reserva de 11 mil millones de pesos.
“Nosotros íbamos todas las semanas a entregar raciones de comida a los niños en todas las provincias del país, no en una, en el país completo… para hoy dejarnos quebrados y salir en la prensa diciendo tiene once mil millones ahí de reserva para entregarlo, es una burla”, expresó Gómez.
Dijo que desde enero no han cobrado “un peso”, y que el Inabie mantiene deudas pendientes con 1,394 suplidores. “Accedimos a esta lucha porque estamos cansados de ir y pedir tregua, pedir las otras vías para que nos paguen, hemos agotado todas las vías y todos los recursos”, subrayó.
Gómez dijo que los suplidores se encuentran en quiebra, y que algunos no tienen ni con qué pagar la factura de energía eléctrica. “Es indignante, que las Mipymes, que somos el motor del país nos quiebren… nos utilicen, nos engañen, estamos cansados”, manifestó.
De su lado, Elizabeth Beriguete, consultora Mipymes, afirmó que el Inabie solo le paga a “los integrantes del club mafioso”, integrado por empleados y funcionarios. “Durante los últimos cuatro años se convirtió en un gran criminal, un indolente sin visión de Estado”, indicó Beriguete al referirse al director del Inabie.
Entre los manifestantes estaba Onaika Ramírez, quien reclamó que el Inabie le adeuda 21 millones de pesos, y que sus hijos tienen tres años que no van a la escuela por falta de recursos.
“Otra persona cobró el dinero mío y me dejó las deudas y los problemas”, denunció Ramírez.
Dijo que por la falta de pago perdió un apartamento y tuvo que cerrar una cocina que poseía en el sector de Villa Mella y reclamó a René Jáquez Gil honrar la deuda por el pago de los servicios prestados.