BlackBerry, este fabricante de celulares que llegó a ocupar los primeros lugares en ventas globales hace más de 10 años, se prepara para su regreso a la venta de teléfonos inteligentes y será en el año 2021 cuando presenten un nuevo modelo que llegará con su clásico teclado físico, bajo el sistema operativo de Android y con conectividad a la red 5G.

OnwardMobility, con sede en Texas, trabajará con una subsidiaria de Foxconn Technology Group en un teléfono inteligente BlackBerry con software Android y diseñado para redes 5G, dijeron las dos compañías en un comunicado conjunto.



BlackBerry informó a principios de este año que el grupo chino de electrónica TCL no tendría derechos para diseñar, fabricar ni vender sus teléfonos inteligentes a partir de finales de agosto.

El nuevo teléfono móvil hará su debut en Europa y América del Norte, y estará pensado para atraer al creciente número de personas que trabajan de forma remota, indica el comunicado.



«Los profesionales empresariales están deseosos de dispositivos 5G seguros que permitan la productividad, sin sacrificar la experiencia del usuario», dijo el director ejecutivo de OnwardMobility, Peter Franklin.

«Los teléfonos inteligentes BlackBerry son conocidos por proteger las comunicaciones, la privacidad y los datos».

Franklin agregó que el acuerdo «ofrecerá un nuevo teléfono inteligente BlackBerry 5G Android con un teclado físico».

La participación de BlackBerry en el mercado mundial de smartphones se ha reducido prácticamente a cero, una década después de que dominara el mercado con su diseño de teclado.

El auge de los teléfonos con pantalla táctil iOS, de Apple, y Android, llevó a BlackBerry a abandonar el mercado para concentrarse en software y servicios.

La compañía, con sede en Canadá, otorgó la licencia de la tecnología de su teléfono inteligente a TCL en 2016 en un esfuerzo fallido por revivir su éxito.

El acuerdo anunciado el martes otorga a OnwardMobility el derecho a desarrollar, diseñar y comercializar un smartphone BlackBerry 5G. FIH Mobile, una subsidiaria de Foxconn con sede en Taiwán, diseñará y fabricará el nuevo dispositivo.