Mark Olson, biólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), recomendó el aprovechamiento de la moringa, especie de árbol proveniente de la India, gracias a sus beneficios para inhibir la presión arterial, la concentración de glucosa en la sangre y su efectividad como tratamiento en contra de las infecciones bacterianas.
También conocido con el nombre de “árbol milagro”, la moringa es además una opción económica explicó el experto del Instituto de Biología (IB) de la UNAM. Recomendó que sus hojas no sean expuestas a temperaturas mayores a 40° Celsius, ya que podría perder parte sus beneficios, como lo es el isotiocianato, sustancia que favorece la eliminación de toxinas del cuerpo y lo reconfortan frente a las sustancias nocivas que ingerimos a diario.
Indica El UNIVERSAL que esta planta puede ser consumida o bebida a través de su infusión; sin embargo cuando es hervida para la preparación de té se destruye la enzima responsable de sus propiedades benéficas y también su probable efecto anticancerígeno, advirtió el catedrático de la UNAM; sin embargo “sigue llena de proteínas, entonces para uso alimenticio es excelente, pero si queremos que ayude contra la diabetes y otras afecciones, se debe procesar de manera diferente”.
“La infusión en frío es la mejor opción para preservar los isotiocianatos contenidos en la planta, lo que significa agregarla en agua a temperatura ambiente unos 30 minutos antes de ingerirla, y la sugerencia es poner de tres a cinco gramos de hoja seca en un litro de agua”, explicó el científico mediante un comunicado de la Máxima Casa de Estudios.
Olson expuso que entre los tipos de moringa el más común en el país es el oleifera, que se halla en la costa del Pacífico, se extiende desde Sonara hasta Chiapas y en algunas zonas del Golfo y de la península de Yucatán. Pertenece al orden de las Brassicales, donde también están la col, el rábano, berros y brócoli.
“Todas estas plantas producen isotiocianatos, moléculas con azufre, cianuro y azúcares, que son muy activas biológicamente”, detalló. Además comentó que crece de manera muy rápida en México, al alcanzar hasta ocho metros de altura en su primer año.
Uno de los vegetales más beneficiados es el brócoli, explicó el catedrático de la UNAM, ya que los isotiocianatos incrementan los niveles de las enzimas de destoxificación, lo que demuestra que esto ayuda a disminuir la incidencia de cáncer en células in vitro, en animales y en varios estudios en humanos: “Hemos hecho investigaciones que confirman que la moringa es una buena fuente de isotiosianatos, pues tienen igual o mayor potencia de inducción de respuesta fase dos que el sulforáfano”, afirmó Olson.
Ante sus noblezas, Olson advirtió que es importante medir su consumo, ya que los grandes concentrados de la moringa, tanto su administración en altas dosis es capaz de producir alteraciones reproductivas, testiculares o aborto en animales.