Georgetown, Guyana. El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, usó el viernes su parada en Guayana durante su viaje por Sudamérica para volver a pedir la salida del presidente de la vecina Venezuela, Nicolás Maduro.
«Sabemos que el régimen de Maduro ha diezmado al pueblo de Venezuela y que el propio Maduro es un narcotraficante acusado. Eso significa que tiene que irse», dijo Pompeo en Georgetown durante una conferencia de prensa conjunta con el presidente de Guyana, Irfaan Ali.
El diplomático estadounidense también resaltó la ayuda de tres millones de dólares que Washington brindó para colaborar con Guyana en la ayuda a refugiados venezolanos.
El pequeño país en el noreste de América del Sur acogió alrededor de 22.000 de los casi cinco millones de venezolanos que huyeron de la crisis económica de su país, provocada por la mala gestión y la corrupción encabezada por Maduro, según Estados Unidos.
Unos 50 países, incluido Estados Unidos, consideraron fraudulenta la reelección de Maduro en 2018 y exigen el restablecimiento de la democracia en el país sudamericano.
A principios de este año, el Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó cargos por tráfico de drogas contra Maduro y su circulo íntimo, y ofreció una recompensa de 15 millones de dólares por su detención.
Sin embargo, Maduro se niega rotundamente a dar marcha atrás y conserva el apoyo de las poderosas Fuerzas Armadas, así como de Rusia e Irán en la arena internacional.
Pompeo tiene previsto visitar la frontera de Brasil con Venezuela más tarde este viernes, antes de dirigirse a Colombia, como parte de una campaña para resaltar la devastación económica de Venezuela bajo el gobierno de Maduro.
El funcionario estadounidense comenzó su gira por Sudamérica el jueves en Surinam.