Con LeBron James y Anthony Davis en primera línea, Los Angeles Lakers se impusieron este martes en un feroz duelo a los Miami Heat por 102 a 96 y se colocaron en ventaja 3-1 en las Finales de la NBA, a solo un triunfo del título.
Tras la derrota del domingo ante unos Heat debilitados por las lesiones, los Lakers se conjuraron para dejar encarrilada la serie de la mano de LeBron James, que terminó con 28 puntos, 12 rebotes y 8 asistencias, y Anthony Davis, con 22 puntos y 9 rebotes.
Miami tenía de vuelta a su pívot Bam Adebayo, una de sus dos sensibles bajas junto a Goran Dragic, y se mantuvo siempre al acecho en el marcador, pero las estrellas angelinas remataron en la recta final con la ayuda esta vez de algunos secundarios como Kentavious Caldwell-Pope (15 puntos y 3 triples).
«El trabajo no está terminado», insistió James, recalcando que no piensa descansar hasta conquistar su primer anillo con los Lakers y el cuarto de su carrera a sus 35 años.
«En este punto de la temporada, no me importa descansar, no me importa dormir (…) Dentro de una semana, como máximo, ya podré descansar», afirmó el alero, que ha reconocido que le cuesta conciliar el sueño en estas Finales.
Jimmy Butler, héroe del triunfo del domingo, terminó con 22 puntos, 10 rebotes y 9 asistencias, y Adebayo con 15 puntos y 7 rebotes para un equipo que no pierde la confianza de remontar.
«Vamos a responder (…) Este equipo está hecho para los desafíos. No esperábamos que esto fuera sencillo», dijo Erik Spoelstra, técnico de los Heat, quienes clasificaron por sorpresa a las Finales tras eliminar a favoritos como los Milwaukee Bucks de Giannis Antetokounmpo.
El quinto partido se disputará el viernes en Disney World (Orlando) y los Lakers tendrán la oportunidad de celebrar su campeonato número 17, con el que igualarían el récord de los Boston Celtics.
El equipo angelino, que se impuso por 4-1 en sus otras tres eliminatorias de playoffs, tiene de su lado los precedentes históricos, que dicen que solo un equipo fue capaz de levantar un 3-1 en contra en unas Finales y lo lideraba precisamente LeBron James: los Cleveland Cavaliers de 2016 ante los Golden State Warriors.
– LeBron y Davis deciden –
Los Heat llegaban al partido del martes con una inyección de confianza al recuperar a su pívot All-Star Bam Adebayo, quien se sometió en los últimos días a intensos tratamientos para su distensión de cuello.
En el arranque, Jimmy Butler no tardó en retomar su espectacular racha del tercer partido (40 puntos), sumando 13 puntos al descanso con una gran efectividad (5/7 en tiros de campo).
Los Lakers tenían encendidos a sus tiradores Caldwell-Pope y Danny Green (10 y 2), criticados en estas Finales, pero la agresiva defensa en zona de Miami volvía a dificultar su circulación de balón, con LeBron James registrando de nuevo excesivas pérdidas (5 al descanso).
LeBron tuvo una primera parte apagada con apenas 8 puntos (3/8 en tiros), pero tras el descanso apretó el acelerador sumando otros 20 puntos.
– «Uno de los grandes partidos de mi carrera» –
Con dos triples, uno desde larga distancia, y varias espectaculares canastas, ‘King James’ estaba determinado a no entregarle otra victoria a Miami, como había hecho saber a sus compañeros en mensajes de texto durante el día.
«Sentí que, para mí, era uno de los grandes partidos de mi carrera», afirmó. «Quería mandar ese mensaje a mis compañeros, sobre el tipo de momento que era».
Antes del final del tercer cuarto, los Lakers tomaron una ventaja de siete puntos (71-64) entre signos de fatiga de Jimmy Butler, quien se había cargado a sus espaldas al equipo en los dos partidos anteriores jugando 45 minutos en cada uno.
En una arriesgada maniobra, Davis, un pívot de 2,08m de altura, fue el encargado del marcaje sobre Butler (2,01) y respondió con una espectacular actuación defensiva, en la que sumó 1 robo y 4 tapones.
El último cuarto fue un duelo de alta tensión con LeBron, que estuvo discutiendo todo el juego con los árbitros, encarándose con Jae Crowder tras recibir tres duras faltas consecutivas.
Davis volvió a anotar un triple decisivo a falta de 40 segundos para sentenciar a los Heat a los que, con Butler (43 minutos en pista) y Adebayo exhaustos, les faltaron armas ofensivas.
«Hubo algunos momentos de la verdad, donde todo se reducía a hacer jugadas, y fueron ellos quienes las hicieron», reconoció Spoelstra.
Miami tratará de aprovechar los tres días de descanso hasta el viernes para retomar fuerzas e intentar recuperar a Goran Dragic, el tercer mejor anotador del equipo.
Fuente: AFP