Hallar un empleo en tiempos de pandemia es posible. Céntrate en tus objetivos, mantén una mente positiva y adapta tu currículum al universo digital y tecnológico.
Busca en los sectores que han salido reforzados por la crisis
Ten en cuenta los sectores que más trabajo demandan actualmente, es decir; alimentación, educación, sanidad, farmacia, higiene, logística, tecnología. Además, las profesiones correspondientes a estos sectores también estarán muy demandadas:
- Teleoperador/a: podrán atender no solo mediante el teléfono, sino también por chat y, cada vez más, mediante videoconferencia. Serán perfiles muy buscados, pero tendrán que desarrollar competencias comunicativas como por ejemplo lo escucha activa, además de saber analizar información y transmitirla.
- Especialistas en márqueting: las empresas competirán por la atención de los consumidores, lo cual tendrá impacto en sus campañas de comunicación y marketing, que se centrarán en la personalización.
- Cuidador/a: una profesión al alza desde hace años y es previsible que aumente la demanda de personas que se puedan ocupar de personas dependientes o hacer de canguros.
- Limpieza y personal de mantenimiento: igual que las profesiones relacionadas con la salud, las relacionadas con la higiene de establecimientos o de mediados de transporte serán solicitadas para garantizar el control de los contagios.
- Formadores/as en habilidades de comunicación y trabajo en equipo en remoto: a causa de las nuevas situaciones de trabajo, las profesiones que faciliten la productividad del teletrabajo serán solicitadas.
La formación es clave
Formarse siempre es parte fundamental de la búsqueda de trabajo. Aquellas personas que se adaptan a las circunstancias y que no dejan de aprender son las que tienen más posibilidades de encontrar trabajo.
La clave es formarse en temas nuevos para estar abiertos y preparados delante de las nuevas expectativas y oportunidades. De hecho, durante la pandemia, muchas personas aprovecharon para formarse con diferentes cursos, talles y conferencias online.
Prepararse para las entrevistas telemáticas
Si antes de la pandemia el 40% de las entrevistas se hacía en formato virtual, ahora la tendencia ha aumentado exponencialmente. En ellas, igual que en una entrevista habitual, debes tener en cuenta la puntualidad y la formalidad.
También deberás comprobar con antelación que la tecnología funciona bien: micrófono, cámara, conexión a internet, etcétera… Además de otros aspectos como el espacio, que deberá ser amplio, ordenado y luminoso.
Diseñar una estrategia
Antes de acudir a una entrevista, debes tener en cuenta cuáles son nuestros objetivos y que esperas de ese puesto, además de nuestra proyección laboral. Como apuntan los expertos, hay que preguntarse: ¿dónde me veo de aquí a tres años?
Buscar info google
Esta es casi la primera tarea que hay que hacer cuando se está buscando trabajo, porque es el que hará el reclutador casi antes de mirar nuestro currículum. El 86% de las empresas utiliza las aplicaciones y las redes para conocer más bien los candidatos.
Es el momento de ver qué información pública hay de nosotros a internet, eliminarla si consideramos que no nos favorece en la busca de ocupación o, al menos, estar prevenidos por si nos lo preguntan a la entrevista. Hacer marca personal mediante las redes sociales es fundamental para saber transmitir nuestra propuesta de valor. En este sentido, LinkedIn es la red de redes. No olvides actualizarla y conectar con muchos otros trabajadores.
Reactivar las redes de contacto
El dato de que el 80% de las ofertas de ocupación nunca salen al mercado constata como es de importante tener una buena red de contactos, y hay que cuidarlos durante toda la vida profesional, especialmente en momentos de investigación de trabajo.
Ahora bien, no se trata de coger los 3.500 contactos de LinkedIn y enviarlos un correo electrónico masivo, sino más bien de hacer una prospección y enviar diferentes mensajes a diferentes contactos según el que esperamos conseguir de cada uno.
Adaptarse a los cambios
El mercado laboral tal y como lo conocíamos está cambiando. Y el teletrabajo ha llegado para quedarse. Los candidatos que tengan experiencia en teletrabajo estarán mejor posicionados en la investigación de ocupación.
Por otro lado, el trabajo autónomo también aumentará, puesto que muchas empresas estarán abiertas a contratar productos y servicios externamente, así que en determinadas profesiones no estaría de más valorar la posibilidad de trabajar como autónomo (freelance).
Convertir el currículum en una propuesta de valor
A pesar de que el currículum de toda la vida (ya sea en formado papel, vídeo o en linea) continúe siendo una buena herramienta como base de datos de nuestra trayectoria profesional, ahora se habla de «propuesta de valor».
Pero ¿qué es exactamente? «El candidato tiene que pensar por qué la empresa lo tendría que contratar a él y no a otra persona, en qué es especialmente bueno y cómo puede contribuir a mejorar la organización. La diferencia entre hacer un currículum y una oferta de valor es que el demandante se anticipa al hecho que la empresa vea en él una necesidad y, a partir de aquí, redacta un documento que en su formato podría ser pareciendo al currículum, pero no está enfocado al que es —esto se puede decir al final, casi como anécdota—, sino al que puede aportar de valor a la empresa», comenta Manel Fernández.
Aprovechar los recursos públicos
Pero ¿qué más podemos hacer? Según Manel Fernández, «la Administración ofrece recursos sin mucha coordinación. Se pueden aprovechar los recursos de la comunidad autónoma, del Ayuntamiento, del Estado, del consejo comarcal… Hay muchísimos y, además, son gratuitos; seguro que alguno es de ayuda en el proceso de investigación de trabajo o de transformación profesional. La clave no rae a esperar, sino a buscar y aprovechar todas las oportunidades que ofrece el sistema».
Mantener una mente positiva
Buscar trabajo es una carrera de fondo y es importante mantener una actitud positiva ante los inconvenientes que seguramente surjan durante el proceso.
«Todas las revoluciones industriales comportan crisis, pero no nos podemos quedar con una visión negativa, sino tomar una actitud resiliente, de aprendizaje y mejora», reflexiona Aran.
Escrito por Sara Roqueta en objetivobienestar.com