La psicóloga, terapeuta sexual, familiar y de pareja, Ana Simó, recomendó este lunes a que las parejas confronten los pleitos y crisis para que entre ellos haya un mejor entendimiento.
Durante su intervención en La Receta Médica, Simó explicó que cuando se dan los conflictos, pleitos entre las parejas, es porque hay algo que no les parece bien.
“Tenemos, óigame no le huyan al pleito y le voy a explicar, cuando no confrontamos el pleito yo no voy a distinguir lo que a ti te molesta de mí, yo no voy a distinguir aquella situación que te disgusta, no voy a saber negociar contigo, no voy a saber que pasa realmente y señores muchas relaciones se desgastan, muchas relaciones terminan”, manifestó.
En ese sentido, la psicóloga aseguró que por no confrontar las crisis, muchas relaciones acaban en desilusión, desamor y hasta terminan odiándose, y que hay gente que le teme a las crisis porque creen que al pelear van a terminar la relación cuando a su juicio ocurre lo contrario.
“No señores, al contrario tenemos que confrontar las crisis y en una crisis no nos tenemos porqué insultar, ni en una crisis no nos tenemos que decir cosas feas, simplemente tenemos que escuchar al otro y escuchar no significa ni subir la voz y escuchar no significa que tú me tienes que agredir, ni sacarme los trapitos al sol”, expresó.
De igual forma, la terapeuta señaló que pese a que algunas personas evitan las peleas, “porque hay gente que cuando abre la boca lo único que hace es agredir”, manipular y herir a su pareja, la mayoría aprende a manejar dichas crisis, ya que las mismas lo ayudan a entender lo que ocurre en una dinámica de pareja.
Ana Simó sostuvo que al inicio de una relación hay una ilusión de enamoramiento que se tiene que ir porque ese no es el verdadero amor, sino que el amor real viene después, cuando se ve a la pareja en su totalidad, cuando se ven sus defectos y cuando se aprende a aceptarla sin pretender cambiarla.
“Cuando hablamos de aceptación en una relación de pareja lo único que usted no puede negociar es con su dignidad, lo único que usted no puede negociar: nada que vaya en contra de su dignidad, pero siempre su pareja va a tener cosas que a usted no le gusten”, recalcó.