Infectólogos y expertos en salud pública aseguran que el 80% de la transmisión del coronavirus se concentra en seis lugares.
Esto no significa que el virus no pueda contraerse en otras partes. De hecho, el coronavirus circula en mercados, hogares, gimnasios, al aire libre. Por eso el uso de máscaras: para estar protegidos siempre y proteger a otros.
Sin embargo, el doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de los Estados Unidos, y el doctor Robert Redfield, director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC), entre otros expertos en salud pública, aseguran que hay lugares específicos en donde el riesgo de diseminación del virus es mayor.
1. Bares
Como dijo en una columna de opinión la doctora Elisabeth Rosenthal, editora de Kaiser Health News, «los virus no son villanos que persiguen a sus presas; son oportunistas pasivos. Algunos se propagan a través de los alimentos o cuando se dejan en superficies. Otros, como este coronavirus, pueden transmitirse a través de pequeñas gotas que pueden permanecer en el aire después que una persona infectada tose, habla o respira. El virus se disemina con mayor facilidad en interiores y, en particular, en lugares concurridos y mal ventilados».
Los bares, y en especial las barras de los bares, son entonces, por definición, lugares propicios para la propagación. El distanciamiento social de 6 pies (dos metros) no aplica. La gente busca estar junta, conversar, y por supuesto tomar, algo que no puede hacerse con máscara.
El mismo consumo de alcohol puede hacer que las reglas que se seguían hace una o dos horas se vuelvan borrosas.
Un informe de los CDC reveló en septiembre que las personas con diagnóstico de COVID-19 tenían el doble de probabilidad de haber visitado un establecimiento en interiores durante las dos semanas previas a recibir la noticia de que estaban infectados.
2. Reuniones sociales: bodas, cumpleaños, celebraciones
Una persona que está incubando la infección y que todavía no presenta síntomas, o incluso si nunca llega a desarrollarlos, puede propagar el coronavirus.
Por eso los infectólogos aseguran que las reuniones sociales que congregan a muchas personas son «puntos calientes» de diseminación.
Eso explica por qué este virus se contrae en los eventos de “superpropagación”. Una persona que está eliminando una gran cantidad de virus todavía se siente lo suficientemente bien como para pasar celebrar en un espacio estrecho (probablemente interior) donde las personas comparten ruidosamente con otras. Y, como el caso de los bares, no pueden usar máscaras porque están comiendo y bebiendo.
Tres puntos para identificar estos eventos:
Varias personas en interiores, donde el distanciamiento social suele ser más difícil.
Ventilación: un lugar con poco aire fresco.
Vocalización: se habla, grita o canta, lo que puede hacer que el virus se mantenga en el aire más tiempo.
3. Restaurantes
Aunque están funcionando al 50% o al 25% de su capacidad, los restaurantes siguen siendo espacios cerrados. Por eso, mientras el tiempo ayude, el exterior debe ganarle al interior.
Con la propagación de persona a persona y por vía aérea (ver explicación más abajo), el espacio cerrado se ha convertido en escenario de superpropagaciones, en donde por ejemplo de los 200 invitados a una boda, 80 resultaron infectados.
Un estudio realizado en Japón comprobó que la humedad del aire interior puede ayudar a propagar el coronavirus.
4. Cafés
Aunque con menos aglomeraciones que en restaurantes y bares, los cafés también han demostrado ser foco de brotes.
Según el informe de los CDC, el principal problema con los cafés es el tiempo que las personas pasan en ellos. Los clientes suelen instalarse con sus computadoras y dispositivos durante horas, lo que los pone en mayor riesgo de entrar en contacto con el coronavirus.
5. Hoteles
Aunque no hay aglomeraciones, la circulación de personas en los hoteles es alta, y, aunque desinfectada, una misma habitación pasa de turista en turista.
Por eso, la recomendación de los CDC es no viajar. Los viajes, especialmente los largos, pueden obligar a hacer una parada en hoteles o áreas de descanso donde hay superficies comunes de alto contacto.
6. Sitios de culto
Desafortunadamente, una de las actividades en la que se «disparan» más virus es a través del canto. En los sitios religiosos se canta y se recita.
El estudio de los CDC encontró que el 7.8% de las personas que dieron positivo para COVID habían estado en una casa de culto.
Por qué los espacios cerrados y la aglomeración son peligrosas
Con base en la experiencia que la comunidad científica tenía con otros coronavirus, y por los datos que fueron surgiendo, se determinó casi inmediatamente que, con mayor frecuencia, el virus que causa COVID-19 ingresa al cuerpo de las personas cuando partículas virales «aterrizan» en sus manos y se tocan la boca, la nariz o los ojos.
Estas partículas virales que pueden entrar a un organismo las expele una persona infectada al toser, estornudar, o simplemente hablar. Por eso, se estableció que una distancia social de 6 pies (2 metros) es una eficaz forma de prevención.
Un virus es algo tan pequeño que no puedes verlo. Al expeler las partículas virales, éstas flotan en el aire por un tiempo y luego caen. Si «aterrizan» en una superficie, pueden permanecer allí por horas y hasta días, y una persona también puede infectarse al pasar la mano por alguna de esas superficies y luego tocarse la cara.
Esta teoría es la que ha sostenido por meses la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Sin embargo, la organización ahora está revisando su postura, luego que más de 200 científicos de todo el mundo firmaran una carta solicitando a la OMS que analizara la transmisión del nuevo coronavirus por vía aérea.
Ahora bien, ¿cuál es la diferencia? Porque a simple lectura pareciera lo mismo: el virus sigue estando en el aire.
La diferencia es que en la transmisión por vía aérea, las partículas virales no caen rápidamente luego de ser expelidas, sino que se mantienen en el aire flotando por horas luego que una persona infectada habló, tosió, estornudó o respiró.
Esta forma de propagación genera más casos potenciales porque la persona ya no tiene que estar cerca de otra que porta el coronavirus para estar en riesgo. Si las partículas virales permanecen por horas en el aire, simplemente caminar por el lugar puede exponer a la persona al contagio.
No descuidarse en ningún lugar
El hecho de que los expertos enumeren un listado de lugares de mayor riesgo no quiere decir que en otros lugares no se pueda contraer el coronavirus.
Por eso es esencial seguir las reglas de salud pública básicas y sencillas: usar máscara, practicar el distanciamiento social y lavarse las manos con frecuencia.
Los supermercados y las tiendas de ropa, u otras instalaciones, pueden funcionar de manera segura con máscaras mandatorias, distanciamiento y desinfección. No vamos a estos lugares para charlar o socializar, y todos podemos usar máscaras en su interior.
Fuentes: Holadoctor.com/ CDC, estudios científicos.