El jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, acusó el viernes nuevamente a China de ocultar la verdad sobre el origen real del covid-19, cuando un equipo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) llegó la víspera a Wuhan para investigar el asunto.
El diplomático afirmó que enfermedades parecidas al covid-19 circulaban ya en el otoño boreal de 2019 entre el personal de un instituto de virología de Wuhan, ciudad china donde el covid-19 se registró por primera vez.
En un comunicado, Pompeo también instó a los expertos de la OMS a «presionar al gobierno de China» con esta «nueva información».
«El gobierno de Estados Unidos tiene razones para creer que varios investigadores en el [Instituto de Virología de Wuhan] se enfermaron en otoño de 2019, antes del primer caso identificado de la pandemia, con síntomas compatibles, tanto con covid-19 y con enfermedades estacionales corrientes», dijo.
Según el secretario de Estado estadounidense, esa información contradice las afirmaciones de que ninguno de los trabajadores en el instituto se enfermaron de covid-19 u otras enfermedades virales.
«Pekín sigue hoy ocultando información vital que los científicos necesitan para proteger al mundo de este virus mortal, y del próximo», dijo Pompeo, que deja el cargo en cuatro días.
El covid-19 fue detectado por primera vez en Wuhan a finales de 2019 y desde entonces se esparció por todo el planeta, matando a más de dos millones de personas de los más de 93 millones de casos registrados y hundiendo la economía mundial.
La OMS dice que establecer cómo el virus se transmite de animales a humanos es esencial para prevenir futuros brotes.
La administración del presidente estadounidense saliente, Donald Trump, acusa a China por la pandemia, que ha dejado 390.000 muertes en Estados Unidos. Trump suele referirse al coronavirus como el «virus chino».