Santo Domingo. Haciendo un recorrido por la ciudad me detuve en el Puente Peatonal del KM 9 de la autopista Duarte, allí se vende desde mascarillas, comida, puñales y hasta la llamada piedra china, a pesar de que los vendedores son retirados, ante la falta de supervisión vuelven, dificultando el desplazamiento de los transeúntes.



Lamentablemente nuestra ciudad no fue diseñada para favorecer el desplazamiento de los discapacitados y es evidente que se necesitan nuevas estructuras que faciliten el acceso a los Puentes Peatonales.

En este material audiovisual pudimos conversar con una niña que tiene discapacidad motora a la que se le dificulta subir las escaleras del puente peatonal del KM 9 de la Duarte, mientras que un señor no vidente exige un cambio en las  barandillas protectoras, para que las mismas sean colocadas de manera uniforme, evitando así darse golpes, además de retirar los negocios improvisados, ya que en varias ocasiones ha tropezado hasta con los pedigüeños.



Tanto el Ministerio de Obras Públicas como los ayuntamientos deben trabajar de la mano juntos para rediseñar la ciudad en busca de que sea más inclusiva.