El aparato digestivo es, valga la comparación, como el motor de un auto. Necesita estar aceitado, cuidado, con un mantenimiento perfecto para funcionar bien y nunca dejarnos varados.
Y lo que comemos es lo que puede ayudar a «limpiarlo». Esa escobilla saludable pueden ser los mismos alimentos y algunos remedios caseros que tenemos a la mano y que quizás ni sabemos que pueden ser útiles para depurar el sistema digestivo.
El guineo maduro, el aguacate, el agua, o el agua con un poco de sal son las recomendaciones que tal vez hemos escuchado de la abuela.
Pero hay algunos alimentos que, si se los consume de manera consistente, pueden ayudar a que el sistema digestivo, y en el especial el estómago, se mantengan cero kilómetro por largo tiempo.
La siguiente lista se ha tomado de estudios científicos y del libro 100 remedios tradicionales, 100 tratamientos caseros para la salud y el bienestar, de Sarah Merson, del College of Naturopathic Medicine, del Reino Unido.
Higo
Esta fruta oriunda de Persia es un laxante natural. Contiene ingredientes activos que estimulan el movimiento intestinal y una cantidad importante de fibra soluble, que también tiene un efecto depurador.
Expertos aseguran que es ideal tener jarabe de higo a la mano, y tomar una cucharada cuando se necesite para combatir el estreñimiento. Simplemente se hierve la fruta, sin piel, en agua, y se le agrega melaza (miel oscura).
Si la constipación es un problema recurrente, combinar el higo con ciruela potencia su efecto limpiador.
Manzana
Esta fruta, considerada un superalimento desde hace siglos, estimula el hígado y los riñones, limpiando el organismo de toxinas.
Las manzanas son ricas en pectina, que combate la constipación y la diarrea, y elimina desechos de las paredes intestinales, favoreciendo la sana circulación de heces.
Además, esta fruta es una de las que contiene mayor cantidad de fibra, especialmente en la piel, por eso se recomienda lavarla bien pero no pelarla.
Las fibras de las manzanas pueden ralentizar la digestión, lo que ayuda a sentir una mayor satisfacción luego de comer.
Después de darle seguimiento a tres grandes cohortes prospectivas de 133,468 hombres y mujeres durante 24 años, investigadores encontraron que una mayor ingesta de frutas ricas en fibra con una carga glucémica baja, particularmente manzanas y peras, se asociaron con una menor cantidad de aumento de peso a lo largo del tiempo.
Comer alimentos con baja carga glucémica tiende a producir picos cada vez más pequeños de azúcar en la sangre, lo que puede disminuir el hambre, y evitar comer en exceso.
Un peso controlado pone menos presión en el sistema digestivo y le permite funcionar mejor, sin tener que «trabajar» con alimentos que lo perjudican.
Remolacha
La remolacha tiene propiedades purificadoras que ayudan a limpar el estómago.
Este vegetal de intenso color púrpura tiene bajo contenido de grasas, pero es rico en carbohidratos, almidón, fibras solubles, proteínas, a la vez que es un producto con un valor calórico moderado.
Todas las partes de esta planta tienen diferentes usos medicinales, como antioxidante, antidepresivo, antimicrobiano, antifúngico, antiinflamatorio, diurético, expectorante y carminativo, es decir que libera los gases del tracto gastrointestinal.
Pero lo que realmente impacta en el estómago y el sistema digestivo en general es su contenido bajo de calorías, que ayuda a controlar el peso y no poner presión en el estómago.
Espárragos
El alto contenido en fibra de este vegetal inhibe el crecimiento bacteriano en los intestinos, ayudando a aliviar afecciones como el sindrome de colon irritable.
En la medicina milenaria de China y de la India, el espárrago se ha utilizado como diurético, en problemas de fertilidad y para promover la producción de leche en las mujeres lactantes.
Aunque la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) de los Estados Unidos no ha aprobado su uso medicinal, la comunidad sí considera al espárrago una fuente valiosa de nutrientes y antioxidantes, y un ingrediente valorable de una nutrición sana.
Avena
La avena es uno de esos alimentos que tienen que ser parte de la dieta sí o sí.
Los datos científicos existentes sugieren que un consumo alto de alimentos integrales contribuye a mejorar la salud intestinal y estomacal, y a reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular.
La avena integral es rica en fibra dietética y una fuente importante de muchos componentes bioactivos, incluidos minerales, vitaminas y compuestos fenólicos.
Pero quizás el componente que vuelve a la avena esencial para la salud estomacal es su fibra soluble, específicamente el betaglucano.
A medida que pasa por el sistema digestivo, se convierte en un gel que ralentiza la digestión, lo que hace que la persona se sienta llena por más tiempo. También es un prebiótico, lo que significa que alimenta las bacterias buenas del intestino.
Licuados
Combinar frutas y vegetales en poderosos batidos (smoothies) puede ayudar a mejorar la salud. Sin embargo, expertos advierten sobre el lado negativo del licuado si se lo consume con azúcar o si se lo combina con frutas y vegetales que tienen mucha azúcar.
Lo ideal es consultar con un nutricionista sobre combinaciones de batidos que sean saludables sin correr el riesgo de efectos no deseados.
Esta información se ha tomado de las fuentes descritas a lo largo del artículo y citadas abajo. Pero no reemplazan el consejo de tu médico
Fuentes: ( Holadoctor.com)T. H. Chan Harvard School of Public Health, ClinMed International Library, University of Utah, libro de Sarah Merson, estudios científicos.