Britney Spears ha podido salir de su encierro por algunas horas. A la intérprete la acompañaron su novio San Asghari y uno de sus hijos.
Britney Spears ha probado una bocanada de libertad al salir de su mansión en Thousand Oaks, California, pues desde que viajó a Hawái en octubre, no había puesto un pie afuera.
A pesar de la controversia que se ha generado en los últimos meses debido a su caso en los juzgados por su tutela, Britney se ha mantenido hermética sobre los detalles de su situación.
La preocupación de sus fans ha llegado a crear el movimiento #freeBritney, que con el documental “Framing Britney Spears” lanzado en febrero, cobró aún más fuerza.
Este documental producido por The New York Times expone cómo es que la industria musical ha explotado a Britney hasta sacarla de sus casillas y dejarla sola, a merced de quienes se han aprovechado de ella.
Britney Spears lideró las listas de popularidad durante los 90 y los 2000, ha tenido álbumes con notables ventas, premios Grammy y giras mundiales; pero aún así, su patrimonio se encuentra por debajo del de Jessica Simpson y Jennifer Lopez.
Britney perdió su libertad cuando la corte cedió su tutela a su padre, Jamie Spears, quien además de cobrar por sus servicios, tiene las facultades para administrar los bienes y las decisiones profesionales de su hija.
Aunque Britney se ha negado a tener entrevistas y presentaciones mientras su situación se mantenga igual, Oprah Winfrey parece haber llamado su atención tras la polémica entrevista que le concedió Meghan Markle, así que de revelar algo, sería con ella.
Mientras que el mundo espera el momento en que cuente su verdad, algunos famosos como Bjork, Miley Cyrus, Shirley Manson y John Mayer le han mostrado su apoyo públicamente. En tanto, Brit disfrutó su paseo junto a su hijo y su novio, con quienes fue a Starbucks por bebidas frías.