Los Phoenix Suns buscan respuestas urgentes para contener al huracán Giannis Antetokounmpo, cuya actuación en estos playoffs está al nivel de los mejores, y evitar que los Milwaukee Bucks les acaben de arrebatar el miércoles su ventaja en las Finales de la NBA.
En una recuperación relámpago, Antetokoumpo pasó de perderse los últimos juegos de la final de conferencia ante los Hawks por una lesión de rodilla a lucir su versión más dominante en las Finales.
Dos veces ganador del premio MVP, Antetokounmpo ha sobrepasado los 40 puntos y 10 rebotes en los dos últimos juegos, una hazaña que solo habían logrado antes en unas Finales Shaquille O’Neal (2000) y LeBron James (2016).
Superando muchos años de sinsabores en playoffs, el ala-pívot griego registra 11 partidos en esta postemporada con al menos 30 puntos y 10 rebotes y solo tiene por delante en esa marca, por el momento, a O’Neal (13, 2000) y Elgin Baylor (12, 1962).
El domingo, en el primer choque de la serie en Milwaukee, Antetokounmpo tuvo por fin el apoyo necesario de sus escuderos Khris Middleton (18 puntos) y Jrue Holiday (21) para que los Bucks sumaran un rotundo primer triunfo (120-100) y redujeran a 2-1 la desventaja con Phoenix.
El partido del domingo dejó al descubierto las dificultades que sufren los Suns para parar a Antetokounmpo, una fuerza de la naturaleza de 2,11m de altura que maneja la pelota y corre la pista como un base.
«Es un halago que haya tres personas delante que me impidan entrar en la pintura», dijo el martes Antetokounmpo.
«Al mismo tiempo, lo odio. Pero al final, tienes que encontrar la manera de jugar con eso», afirmó el griego, que aseguró que su rodilla izquierda «se siente muy bien».
«Estoy contento de que tengamos dos días en medio (de partidos). Ahora tenemos tiempo para cuidar nuestro cuerpo. Es bueno para nosotros mental y físicamente»», afirmó.
– Sin recambio para Ayton –
El principal defensor de Giannis, el joven pívot DeAndre Ayton (2,11m), está siendo una de las grandes revelaciones de los playoffs, pero el domingo entró pronto en problemas de faltas y el técnico Monty Williams no encontró ningún recambio fiable en el banquillo.
«No voy a dejar que ninguna de faltas que pitaron cambie mi agresividad», avanzó Ayton este martes.
«Pero fue bastante frustrante. Realmente queríamos ese partido y necesitábamos un poco más de esfuerzo. Ellos jugaron más duro que nosotros», reconoció el número uno del Draft de 2018, que promedia 16,7 puntos y 13 rebotes en las Finales a sus 22 años.
Cuando ha sido defendido por Ayton en estas Finales, Antetokounmpo anota 0,93 puntos por jugada con un 46% de acierto en tiros de campo mientras que si tiene otro marcador su rendimiento sube a 1,38 puntos y 75%.
El croata Dario Saric, sexto hombre de los Suns, se lesionó de gravedad en el juego inaugural de las Finales y el único pívot que queda en la rotación es Frank Kaminsky, que apenas promedia 1,8 puntos en 6,3 minutos en estos playoffs.
El joven Jalen Smith (2,08m), elegido con el número 10 del pasado Draft, no entra en los planes del técnico y aún no se ha estrenado en las Finales.
Los Bucks, en cambio, cuentan con un potente juego interior que también incluye al pívot titular Brook Lopez y su sustituto Bobby Portis.
– El arbitraje en cuestión –
Tras el choque del domingo, Monty Williams puso un foco de atención sobre el arbitraje, señalando que Antetokounmpo lanzó 17 tiros libres por 16 de todos los jugadores de los Suns combinados.
«La diferencia en tiros libres es la que es, por eso lo dije», se justificó el martes Williams. «Eso no es quejarse, es exponer los hechos».
«Intento ser respetuoso», dijo el técnico negando que quisiera mandar un mensaje al arbitraje. «No quiero jugar de esa manera. No es lo que soy. Quizá me equivoqué en eso. He visto a entrenadores ponerlo en práctica. Solo sé que no soy tan bueno en eso».
El técnico de Milwaukee, Mike Budenholzer, rechazó que los señalamientos de su colega puedan poner presión a los árbitros.
«Es el viejo ritual de los playoffs. No creo que tenga ningún impacto. Lo he visto en ambos sentidos. Creo que los árbitros se limitan a pitar el juego», afirmó.
«Siempre estamos frustrados con ellos y aún así siguen siendo los mejores árbitros del mundo. No creo que tenga nada que ver con el juego», señaló.