El organismo británico de control de la competencia anunció el jueves haber multado a dos empresas farmacéuticas por cobrar de más a la sanidad pública por los medicamentos, denunciando «graves abusos» durante casi una década.
Las multas, que ascienden a más de 260 millones de libras (361 millones de dólares, 305 millones de euros), fueron impuestas a raíz de una investigación de la Autoridad de la Competencia y los Mercados (CMA), que descubrió que los laboratorios Auden Mckenzie y Actavis UK (ahora conocido como Accord-UK) cobraron «precios excesivamente altos» por los comprimidos de hidrocortisona durante casi diez años.
Utilizada por decenas de miles de personas en el Reino Unido, la hidrocortisona trata la insuficiencia suprarrenal.
Para proteger su posición como único proveedor de estos comprimidos y poder seguir inflando los precios, Auden Mckenzie también pagó a los competidores potenciales AMCo (ahora conocida como Advanz Pharma) y Waymade para que se mantuvieran fuera del mercado.
Actavis UK también participó de estas prácticas, precisó la CMA en un comunicado.
«Estos son, sin duda, algunos de los abusos más graves que hemos descubierto en los últimos años. Las acciones de estas empresas han costado a la sanidad pública -y, por tanto, a los contribuyentes- cientos de millones de libras», denunció el director general de la CMA, Andrea Coscelli.
La CMA descubrió que Auden Mckenzie y Actavis UK aumentaron el precio de los comprimidos de hidrocortisona en más de un 10.000% entre 2008 y 2018.
«Son violaciones flagrantes de la ley que inflaron artificialmente los costes pagados por el servicio de salud pública, reduciendo el dinero disponible para la atención a los pacientes. Nuestra multa sirve de advertencia a cualquier otra empresa farmacéutica que tenga la tentación de abusar», subrayó Coscelli.