El expresidente estadounidense Donald Trump atacó el martes al fallecido Colin Powell, antiguo jefe de la diplomacia de Estados Unidos, describiéndolo como un republicano desleal que apoyó la invasión a Irak en 2003 en base a evidencia falsa.

Powell, un héroe de guerra devenido en el primer secretario de Estado negro de Estados Unidos, fue un crítico frecuente del exmandatario e incluso le pidió que renunciara después del asalto del 6 de enero al Capitolio por parte de partidarios de Trump.



«Es maravilloso ver a Colin Powell, quien cometió grandes errores en Irak y en las famosas llamadas armas de destrucción masiva, ser tratado en la muerte tan bellamente por los medios de noticias falsas. Espero que eso me suceda algún día», dijo Trump en un comunicado.

Powell, un general de cuatro estrellas retirado, falleció el lunes a los 84 años por complicaciones del covid-19.



«Era un RINO clásico, si acaso eso, siendo siempre el primero en atacar a otros republicanos. Cometió muchos errores, pero de todos modos, ¡que descanse en paz!», escribió Trump, usando el acrónimo de «republicano sólo de nombre».

Desde 2008, Powell, exmiembro del gobierno del republicano George W. Bush, respaldó a los demócratas a la Casa Blanca: dos veces a Barack Obama, y luego a Hillary Clinton y a Joe Biden.

Powell admitió que fue «una mancha» en su carrera su discurso de febrero de 2003 ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, en el que defendió la supuesta existencia de armas de destrucción masiva en Irak, evidencia que luego se demostró que era falsa.

No es la primera vez que Trump denosta a un fallecido ilustre. Tras la muerte del senador John McCain en 2018, Trump continuó desacreditando al republicano de Arizona, que también estaba entre sus detractores más feroces.

En un discurso siete meses después, Trump dijo que le dio a McCain «el funeral que quería, y no obtuve un ‘gracias'». Trump no fue invitado al funeral.