El humor en los Estados Unidos (en especial en stand up) se caracteriza por ser frontal, rudo, transgresor e irónico. Se nutre de la actualidad para burlarse de los hechos y personas.
Este tipo de humor, denominado por algunos como negro, se evidencia en las premiaciones, actos públicos y, por supuesto, los programas de televisión, de ahí el éxito de Saturday Night Live.
Sin embargo, hay muchos que consideran que hay una delgada línea entre la ofensa y este tipo de humor. Una línea que puede conllevar situaciones como la vivida en la pasada entrega de los Premios Óscar.
Perplejos reaccionaron tanto en los hogares como los que se encontraban en el teatro cuando tras una broma del comediante Chris Rock, considerado de los mejores en este tipo de humor, recibió un fuerte golpe en el rostro del actor Will Smith, luego de escucharlo bromear sobre la alopecia de su mujer, la actriz Jada Pinket Smith.
El chiste que, como se vio en pantalla, no disgustó al actor hasta ver la reacción de su amada que no lo tomó de buena forma decía textualmente: “Jada, te quiero. Estoy deseando verte en La teniente O’Neil 2”, en referencia al personaje interpretado por Demi Moore, en la cual tuvo que cortarse todo el cabello.
La acción de Smith generó todo tipo de reacciones a favor y otras en contra, lo mismo sucedió con el chiste de Rock, que fue quien pagó los platos rotos del guionista que lo creó.
Lo que se vivió en la gala del Óscar fue para muchos un acto de violencia injustificable que censura el humor. ¿No se podrá hacer chistes en las siguientes ediciones?
Opiniones de humoristas criollos
Diario Libre consultó a renombrados humoristas. Uno de ellos fue Luis José Germán, quien no dudó en referirse al tema: “No creo que llegue al punto de censurar, la realidad es que vivimos en tiempos más sensibles y ciertas personas se sienten afectadas directamente ante un comentario generalizado con una broma. La comedia en Estados Unidos siempre se ha caracterizado por ser ruda, sarcástica y negra, y así como hoy en día existe un público más sensible que no lo tolera, también hay otro al que le gusta este tipo de humor”, expresó.
Para el veterano comediante Felipe Polanco “Boruga”, el chiste estuvo fuera de lugar por la situación de salud de la esposa del actor: “Claro que estuvo lo del chiste, sobre todo porque hay una condición de salud de su esposa que estaba presente a su lado, que no le gustó y estamos hablando de la ceremonia más vista del mundo en materia de premios de cine”, señaló.
Calificó el hecho de “poco inteligente en un animador hacer un chiste, aunque se lo hayan escrito o pedido la producción (tú tienes que tener libertada de aceptar o no aceptar lo que tú vas a decir); fue un fallo de ambas partes, porque si tú haces un chiste a costa mía yo creo que no reacciono, pero si se hace un chiste de burla de una condición de enfermedad de mi esposa o de uno de mis hijos uno no sabe cuál será su reacción”, explicó.
Y continuó: «Él se ha caracterizado por tener ese humor negro (que a mí no me gusta), pero fue muy poco inteligente por parte de la producción, si fue la producción, porque si salió de él de Chris Rock fue peor porque se está burlando de una condición física que ella misma ha confesado que incluso ha señalado que se ha frustrado porque es una mujer que presumía de su belleza, pero yo entiendo que cada uno tiene su día, pero reitero, para ser humorista o animador hay que tener tacto, hay que saber en qué momento tú relajas con las cosas de la gente, porque nadie puede quitarle la razón a Will Smith, pero tampoco lo podemos aplaudir”.
«Se pasó ahí Chris Rock y pagó el precio», enfatizó.
Sin embargo, dejó claro que la reacción de Will Smith tampoco se debe aplaudir. “Fue desproporcionada”.
Para Carlos Sánchez “siempre existen límites en el humor y ese límite está un poco más cerca o un poco más lejos dependiendo del chiste, del comportamiento de la persona, de la cultura y del momento; el problema no está en si (con su acto) Chris Rock cruzó o no el límite, porque él hizo un chiste fuerte pero ya se han hecho 500 igual o más fuertes en eventos como este y todo el mundo se ríe», señaló.
Agregó: «En este momento le tocó a Will Smith que se sintió ofendido, pero el problema está en el Will Smith que irrespetó el show, que se subió a la tarima, violó los protocolos de producción, había un equipo de producción trabajando en ese evento, movilizó a todos que no sabían cómo reaccionar. Está violentando el trabajo de un grupo de personas y luego cuando le da la bofetada al comediante creó un ambiente de tensión, la gente dejó de pasarla bien», argumentó.
Para él «todo el mundo tiene derecho a sentrse ofendido, con eso no hay ningún tipo de problemas y quien lo esté lo resuelve como entienda, pero no puede hacerlo arruinando el show ni para el comediante ni para el público y eso fue lo que hizo Will Smith. Él pudo confrontarlo en privado y no convertir una situación así en algo que afectó a todos. Eso para mí fue una falta de respeto mayúscula y marca un precedente muy malo porque ahora con esta generación de cristal donde cualquiera se siente ofendido a hacer algo similar porque es una persona famosa», se lamentó.
“Will Smith se equivocó, rompió con lo establecido, había un personal que trabajó para que todo saliera perfecto y él los tensionó. Eso nunca debió pasar», recalcó.
¿Ha molestado su humor?
Ellos respondieron si en algún show han llegado a molestar con algunos de sus chistes.
«Honestamente no he tenido esos episodios, capaz que alguna ocasión alguna señora ofendida con el doble sentido. Pero aquí el punto importante de lo sucedido entre estas dos figuras norteamericanas es, primero un chiste de mal gusto, inapropiado, ante una condición física y real (alopecia) y segundo una acción impulsiva con agresión física”, señaló Germán.
«Boruga» confesó que una vez en Boston una persona ebria no reaccionó de la mejor manera. “A mí me pasó una vez en Boston hace unos años, que yo me iba a referir a los banilejos para alabar a los banilejos y un borracho no me dejó terminar y me dijo de todo, porque creía que iba a hablar mal de los banilejos, tú sabes que esa ciudad está llena de gente de Baní y esa área por ahí y el hombre se incomodó sin dejarme terminar hablar. Lo que iba a ser un halago para ese pueblo de trabajadores se convirtió en un momento tenso porque el borracho no dejó que yo terminara”, recordó.
Sin embargo, añadió «el humorista tiene que tener, primero decisión propia, dominio de lo que va a decir, aunque se lo escriba otra persona, porque la figura es él como humorista».
Para Carlos Sánchez es imposible que un comediante pueda complacer a todos con lo que dice.
«Hay una serie de variables gigantescas que van determinar que para ti un shiste sea o no sea ofensivo, por lo tantoeso es parte del negocio. Habrá mucha gente que va a decir a mí no me parece ofensivo y otros dirán que sí, ese no es el problema. El humor tiene que mantenerse abierto porque es imposible determinar donde está la raya de la ofensa», expresó.
Continuó: «Yo estoy de acuerdo en que, cada quen se pueda sentir o no ofendido con un chiste porque es una interpretación y lo va a entender como quiera o desee, pero de ahí a romper el show por completo y crear un momento de tensión, hacer que todo el mundo se sienta mal con un acto violento», dijo Sánchez.
Comediantes y figuras estadounidenses también criticaron acción de Will Smith
La bofetada que Will Smith dio a Chris Rock en los Oscar provocó opiniones intensas en internet, especialmente de comediantes que sintieron que fue un ataque a su arte.
“Déjenme decirles algo, es una práctica muy mala caminar al escenario y atacar físicamente a un comediante”, escribió la comediante Kathy Griffin en Twitter. “Ahora todos nos tenemos que preocupar de quién quiere ser el próximo Will Smith en clubs de comedia y teatros”.
“Will Smith le debe a Chris Rock una enorme disculpa. No hay excusas para lo que hizo. Tiene suerte de que Chris no presente cargos por agresión”, comentó el productor, director, comediante y actor Rob Reiner en Twitter.
George Takei dijo que el hecho de que Smith perdiera los estribos era una mala imagen cuando tantas personas lo veían: “Mucha gente, especialmente niños, admiran a los actores. Por eso tenemos la obligación de tratar de ser buenos modelos a seguir. Con la fama viene la responsabilidad”.
Judd Apatow criticó bastante a Smith en un tuit ahora borrado, describiendo el ataque como “furia y violencia fuera de control”. Agregó que las celebridades han sido objeto de chistes por décadas: “Han escuchado un millón de chistes sobre ellos en las últimas tres décadas. No son novatos en el mundo de Hollywood y la comedia. Él se salió de control”.
Richard Marx dijo que ningún chiste malo justificaba esa respuesta: “Creo que millones de personas no pueden comprender que sin importar el nivel de fama o premios nadie tiene permiso para cometer una agresión física por un chiste verbal”.
Mark Hamill calificó el incidente como el momento más feo de la historia de los Oscar: “Los cómicos de stand-up están muy acostumbrados a manejar a espectadores enojados. Agresiones físcias violentas … no tanto”.