Moscow, Rusia. El Kremlin se negó el martes a comentar los testimonios sobre marineros desaparecidos en el naufragio del «Moskva», buque insignia ruso del mar Negro que Ucrania asegura haber hundido en un ataque la semana pasada.

«Todas las informaciones son suministradas por el ministerio de Defensa. No tenemos la prerrogativa de comunicar», dijo el portavoz de la presidencia, Dmitri Peskov.



Ni la marina ni el ministerio han suministrado un balance del naufragio del «Moskva», en el que viajaban centenares de personas.

En estos días, varios testimonios publicados por medios de comunicación en ruso y en las redes sociales hablaban de marineros desaparecidos.



Un hombre que vive en Crimea, llamado Dmitri Shkrebrets, se presentó como el padre de un desaparecido y publicó el domingo un mensaje en la red social Vkontakte donde se preguntaba por qué su hijo, un simple recluta, se encontraba en una zona de combate.

Una mujer, llamada Yulia Tsyvova, afirmó también que su hijo había desaparecido.

Oficialmente, la tripulación del buque fue evacuada y fuentes oficiales afirmaron que no hubo muertos, heridos o desaparecidos.

Las autoridades rusas han subrayado que el buque, con un papel clave en la coordinación de los navíos rusos del mar Negro, se hundió tras un incendio provocado por la explosión de municiones.

Ucrania afirma que sus fuerzas lo hundieron en un ataque con misiles.

El sábado, el ministerio ruso de Defensa divulgó un video que presentó como el encuentro entre un responsable de la marina y decenas de rescatados del buque, en el que podía haber hasta 680 miembros de la tripulación.

El naufragio del «Moskva» es una humillación para las fuerzas rusas e incluso los analistas cercanos al Kremlin han pedido en vano explicaciones a las autoridades.

Rusia reconoció el 25 de marzo 1.351 bajas en sus filas durante la operación en Ucrania, un balance imposible de verificar con fuentes independientes y que no ha sido actualizado desde entonces.