El papa Francisco canceló todos los encuentros previstos para este viernes por problemas de salud, entre ellos una reunión con el ministro de Relaciones Exteriores de Argentina, Santiago Cafiero, informaron fuentes oficiales.

El portavoz de la Santa Sede, Matteo Bruni, declaró a la prensa que el papa tuvo que cancelar su agenda del viernes para «someterse a controles médicos» debido a los dolores agudos que padece en la rodilla derecha.



Francisco, de 85 años, ha tenido este año problemas de salud. Sufre de fuertes dolores a la rodilla y tiene dificultades para caminar, lo que ha marcado todas las ceremonias.

El Domingo de Ramos, ante multitudes de fieles, Francisco estuvo casi siempre sentado, no pudo andar en procesión, llegó en un coche negro al altar y estuvo acompañado por un ayudante.



Las largas ceremonias de la Semana Santa representaron un problema debido a la inflamación que padece desde enero en la rodilla, por lo que se levanta en contadas ocasiones, usa con más frecuencia el papamóvil y necesita apoyarse en un asistente.

El domingo, durante la bendición Urbi et Orbi desde la Plaza San Pedro, ante una multitud, no pudo leer todo su discurso de pie y debió sentarse en medio del mensaje pascual.

Francisco, que en marzo cumplió nueve años de pontificado, tiene problemas también crónicos de ciática, que le suelen causar dolores fuertes, y se sometió a una delicada operación de colon en julio pasado.

En febrero anuló un viaje a Florencia (centro de Italia) por un dolor agudo a la rodilla, «una gonalgia aguda», por lo que le prescribieron un período de descanso.

«Me han dicho que le pasa sólo a los viejos, así que no sé por qué me ha pasado a mi», bromeó entonces el pontífice durante una audiencia general.

El encuentro con el canciller argentino estaba previsto para la mañana del viernes y era considerado una oportunidad importante para hablar de la situación política de su país, de América Latina, así como del conflicto en Europa tras la invasión de Rusia a Ucrania.

«Fue suspendido», confirmó a la AFP una fuente de la cancillería.

Cafiero tiene programadas otras reuniones en Roma, entre ellas con su homólogo italiano, Luigi Di Maio, así como con empresarios y con autoridades de la FAO y del Programa Mundial de Alimentos (PMA) para hablar de la crisis alimentaria mundial generada por la guerra en Ucrania.