Los vehículos exceden la función de ser sólo medios de transporte. Son más que ello: estilo, ingeniería, prestaciones, diseño. Ahora bien, en el caso de los vehículos que utilizan los presidentes esto se intensifica.
Un vehículo presidencial debe representar, como simbolismo, ciertos valores de la Nación. Es por ello que, en general, las fábricas de estos coches son nacidas en su respectivo país. Por ejemplo, podemos citar en caso de China con su marca nacional Hongqi o del Jaguar del primer ministro inglés.
Señala José Bossellini en el portal Tork, que hay vehículos que ya, por su trayectoria o por sus prestaciones y diseño, se convirtieron en un ícono para la cultura automotor
A continuación, nos adentramos en los tres vehículos presidenciales que han dejado su huella.
3- DS 7 Crossback Élysée, del Gobierno de Francia
Emmanuel Macron, actual presidente de Francia, tiene a disposición un coche presidencial bastante particular. DS es una marca de coches de lujo originaria de Francia y perteneciente al grupo empresarial de Citroën.
Con exactitud, el coche se llama DS 7 Crossback Élysée E-TENSE hybrid, con fecha de fabricación en 2017. Este ejemplar se ha trasformado rápidamente en coche de referencia, ya que es el primer híbrido en llegar a ser coche presidencial. Todo un cambio de tendencia.
2- Aurus Senat, del Gobierno de Rusia
Vladímir Putin utiliza esta limusina como coche presidencial. Aurus, marca de origen ruso, viene a reemplazar al antiguo y clásico ejemplar que empleaba el mandatario de Rusia. Se trataba de un Mercedes-Benz S600.
El Senat se trata de un coche blindado y de lujo, sus prestaciones y materiales lo comparan con la fábrica británica Rolls-Royce. El Senat fue creado especialmente para ser coche presidencial y así darse a conocer al mundo por su fuerte impronta.
1- Cadillac One, del Gobierno de los Estados Unidos
Tal vez el coche que ha marcado un quiebre en los coches de mandatarios. Desde la aparición del Cadillac One -apodado La Bestia-, el coche del presidente de los Estados Unidos se roba las miradas dónde sea que vaya.
Blindado y con un peso que oscila en las nueve toneladas, este coche de lujo también es usado como vidriera de la industria de su país, en este caso quien lleva los honores es Cadillac. Como dato curioso, The Beast cuenta con un pequeño depósito de la sangre del presidente, por si llegase a necesitar una trasfusión de urgencia