En este breve artículo expongo que deberíamos repensar las estrategias para disminuir feminicidios y violencia contra la mujer: hasta ahora se habla mucho de que es necesario más policías, más recursos para Ministerio Público, casas de acogida, etc., no obstante, nadie habla de otra posible estrategia, y esta es que mujeres tengan capacidad real de defenderse de un posible ataque mortal.

Primero debo decir que hay personas que confían en la Policía Nacional y en el Ministerio Público…. ese no es mi caso y si algún día me tropiezo con un policía que parece serio y diligente, sé que no hay confiarse mucho.



Independientemente de tu pensar, te puedo asegurar que, si quieres maximizar tus chances de sobrevivir en República Dominicana, debes vivir como si no existiese policía -ni fiscal- alguno para ayudarte cuando seas víctima de algún crimen.

Cuando digo que “vivas como si no existiese fiscal o policía”, lo que trato de decir es que no debes relajar tu seguridad ni ser ingenuo. Nunca podemos confiar nuestra seguridad en que existen unos hombres con uniforme “encargados de protegernos”, porque de hecho vemos a diario que no son eficientes en su trabajo.



En el caso particular de la violencia contra las mujeres y antes de que vengas con el argumentó cliché y sin sentido de que “el Estado es quien debe proteger a sus ciudadanos/as y tiene el monopolio de la fuerza” citado de forma poética y con voz presentador de telenovela, déjame plantearte mi pensar al respecto, y que se resume en decir que todas las mujeres deben saber defenderse, y en situaciones extremas, deben aprender a usar fuerza letal.

Nota: los principios de seguridad que planteo, se encuentran en el libro “The Safety Trap: A Security Expert’s Secrets for Staying Safe in a Dangerous World” de Spencer Coursen, disponible en Amazon.

1.Falacia de la autoridad. Muchas víctimas de violencia de género -y violencia en general- tienen la falsa creencia de que las autoridades van a actuar eficientemente ante una denuncia… creen que, por el hecho de poner una denuncia en la fiscalía, de repente se moverá cielo y mar para garantizar su protección. Esto es falso y se confirma cada vez que hay un feminicidio y familiares expresan que las autoridades no brindaron la atención debida al caso cuando era necesario.

2.Ante posibles hechos delictivos se necesita actitud proactiva. En este sentido hay acciones para prevenir el hecho de violencia y también hay actos para enfrentar hechos de violencia. Hay que resaltar este punto muy bien: una cosa es usted hacer todo lo posible para prevenir la violencia y otra cosa es defenderse de la violencia cuando ya esté siendo ejercida…las únicas formas de enfrentar una paliza física son huyendo o peleando. Lo racional es siempre huir…sin embargo, puede darse el caso de que no se pueda huir porque usted está arrinconado, y entonces la única salida es pelear.

Ejemplos de prevenir un feminicidio son: saber identificar conductas de peligro en parejas y actuar al respecto; informar autoridades; buscar redes de apoyo; entre otras. Sin embargo, también se necesitan actos y habilidades para enfrentar violencia cuando ya está siendo ejercida, como lo es un ataque a la integridad física de mujer que no tiene escapatoria. La mujer que no esté preparada para un posible y real ataque a su integridad física -sin posibilidad de escapatoria- tiene poco chance de sobrevivir si así ocurre. Sin embargo, si una mujer sabe que DEBE prepararse para un posible escenario como éste, tiene chance de sobrevivir.

¿Quiere decir esto que todas las mujeres deben tener habilidades de defensa extrema? Posiblemente no, pero si una mujer sabe que su expareja es violenta y hay indicios de peligro inminente, no debe escatimar recursos en aprender cuanto antes a defenderse y si está en su alcance a usar armas de fuego u otro tipo. Ya sé que van a pensar que estoy planteando algo loco, pero te pregunto sinceramente ¿cuál es la alternativa? ¿Llamar a la policía cuando aparezca tu expareja, en tu casa y lista para asesinarte? Tal vez la policía nunca llegue…diría que sabes no llegará.

Terminar sólo diciendo que creo también en el fortalecimiento de las instituciones, pero mientras alcanzamos un Estado idílico de seguridad y empieza a funcionar la Policía y fiscalías, tenemos que actuar y no dejarnos matar.

Por Franklyn José Hernández Bretón- Lic. en Derecho y Economía