Tres personas murieron a balazos desde el lunes en protestas en Haití, según un organizador de las manifestaciones y la policía, mientras un movimiento que exige la renuncia del primer ministro Ariel Henry se extiende por varias ciudades.
Desde el lunes, se han levantado barricadas en las principales carreteras del sur del país, y el transporte público y los negocios están paralizados.
Los manifestantes denuncian en particular la escasez de combustible y la inseguridad.
Un manifestante fue asesinado el lunes en la capital, Puerto Príncipe, por personas no identificadas que abrieron fuego contra la multitud, según Serge Jean Louis, opositor al gobierno y organizador de la protesta.
«Es un grave atentado a la libertad de manifestación en el país. Un hombre fue asesinado porque (reclamaba) mejores condiciones de vida en el país», lamentó.
En Les Cayes, al sur, dos personas murieron el martes mientras la policía intentaba desbloquear la vía de acceso a un aeropuerto, anunció un oficial, negando cualquier responsabilidad de las fuerzas de seguridad por estas muertes.
Por otro lado, policías dispararon e hirieron a cuatro personas que participaron en el saqueo de las instalaciones de una organización benéfica, reconoció ese funcionario en una conferencia de prensa.