Además de ser totalmente increíbles, muchos de los ‘looks’ que luce Kim Kardashian son extravagantes e incómodos a partes iguales. La prueba más evidente de ello es el vestido que llevó en la gala MET (y que tanta controversia generó) junto con el estilismo compuesto por cinta adhesiva del que se burló hasta la propia Kardashian.

En la Semana de la Moda de Milán, la ‘celebrity’ colaboró en el desfile de primavera-verano 2023 de Dolce & Gabbana y en el ‘after party’ lució un vestido con el que era complicado andar y, por lo tanto, ha generado risas en las redes.





Una vez más, Kim ha vuelto a aplicar la frase que dice que para presumir, hay que sufrir. Un vestido largo hasta los pies con lentejuelas plateadas y con aberturas en los laterales es el estilismo que ha acaparado las miradas de todos. Y no solo por lo bonito que era.

Al ser tan estrecha, la prenda no le permitía andar con normalidad, además de impedirle subir las escaleras o entrar en el coche. La propia Kim se ha reído de sí misma y ha publicado una recopilación de varios fragmentos donde podemos verla andar como un pingüino e incluso subir escalones saltando.

Fuente: Cosmopolitan