Después de varios años de ausencia por la pandemia Covid-19, recesión económica y un mal manejo gubernamental en el 2020, artistas, manejadores, empresarios artísticos y productores de eventos multitudinarios consideran que ha llegado el momento de que las autoridades retomen el auspicio de las fiestas populares para la época de Navidad y Año Nuevo.

Representantes de la industria del entretenimiento estiman que la sociedad dominicana está agobiada de muchos problemas económicos, carestía de la canasta básica y hace poco salió de los embastes de un fenómeno natural, razones más que suficientes para recibir descarga, cambiar pena por alegría, a través de buen entretenimiento que pueda proporcionar sus principales artistitas, de todos los géneros en la geografía nacional.



Detalla CARLOS OSI PÉREZ en NDIGITAL, que equidad y transparencia en eventuales distribuciones de presentaciones , es lo único que exigen los merengueros Ramón Orlando Valoy, Pochy Familia, Kinito Méndez, Monchy Capricho, Aracelis Mateo (mánager salsero Yiyo Sarante) Ramón Benito (mánager Amarfis y la Banda de Atake), Aracelis Mateo (manejadora del salsero Yiyo Sarante) y Yannely Medina (manejadora del urbano Vakeró).

También las empresarios artísticos y productores de eventos masivos: Amable Valenzuela, Alberto Benabé (Bebeto) y Raphy D`Oleo.



UN ALIVIO

Ramón Orlando estima que sería bueno que si el Gobierno cuenta con las partidas presupuestarias correspondiente procediera a patrocinar estas fiestas populares, que forman parte de la tradición navideña en el país.

Indicó que aunque no se involucra mucho con este tipo de eventos, pero si contribuye a ayudar a muchas gentes necesitadas y es positivo que haya movimiento festivo en el mes que más se alegran los corazones.

“Ayuda a mucha gente que lo necesita, además: al pueblo hay que tenerlo alegre, sobre todo cuando hay tantos problemas”, manifestó.

RD NECESITA DE ALEGRÍA

Para Pochy Familia el pueblo dominicano está necesitado de alegría que podrían perfectamente lograr a través de las fiestas en las calles, encada pueblo y barrio.

Otro aspecto positivo que el líder de la Coco Band ve en estos eventos, es que dinamiza la economía en sentido general, inyectando recursos a una serie de personas que se desprenden de las fiestas populares.

RESPIRO PARA LA POBLACIÓN

Kinito Méndez respalda totalmente que se retomen los eventos populares auspiciados por el Gobierno porque lleva respiro a la población, le brinda momentos de felicidad y la oportunidad a gente humilde de disfrutar gratuitamente de artistas, de diversos géneros.

“El pueblo goza, pero la industria artística también necesita de trabajo y el Gobierno queda bien con el pueblo”, manifestó el Hombre Merengue.

COMITÉ DE LA EQUIDAD

El popular merenguero Monchy Capricho, es de opinión que el Gobierno “debe votar la casa por la ventana en estas navidades” debido a que la sociedad dominicana está bajo mucha presión, acumulada por las secuelas del Covd-19, el alto costo de alimentos y combustibles (por la guerra Rusia-Ucrania) y los ataques de fenómenos naturales.

Además porque las fiestas de Navidad y Año Nuevo auspiciadas por el Gobierno, llevan varios años sin celebrarse.

“Los países son como las ollas de presión, que deben de tener su válvula de escape, porque si no… explotan. Los gobiernos no han entendido la importancia de fomentar la cultura en éste país”, argumentó.

El intérprete de “Adolescente tu”, “Rodando” y decenas de éxitos más, entiende que lo importante es que sean bien organizadas y plantea que se designe un comité gestor donde estén representados todos los géneros musicales, humoristas, animadores, productores y oros, a los fines de que haya equidad y transparencia a la hora producir estos eventos.

“Pienso que deberían volver las actividades, pero que se distribuyan de forma equitativa”, insistió Monchy.

ESCENARIO PARA LOS DOMINICANOS AUSENTES

Yannely Medina, mánager del cantante urbano Vakeró, plantea que en el país se está produciendo una recuperación de la economía y ya no hay tantas restricciones para los dominicanos ausentes venir a su patria y disfrutar popularmente con sus familiares y allegados.

En tal sentido, Medina consideró que estas fiestas populares le dan la oportunidad de juntar a personas que tienen mucho que no se ven y sentir ese sabor a pueblo que hace un bien tiempo no sienten.

“Es una forma del pueblo distraerse, pasarla bonito y que los artistas también lleguen con pan a sus hogares”, indicó la manejadora del urbano.

DIVERSIÓN AL PÚBLICO Y TRABAJO PARA LOS ARTISTAS

Aracelis Mateo es la manejadora del popular salsero Yiyo Sarante y consideró que las fiestas masivas en navidades sirven para alegrar, al menor costo, al pueblo y a la vez, proporcionan trabajo para los artistas, de manera que benefician a todos.

Plantea que la distribución de bailes bien podría hacerse en base a sondeos y que sea el público que decida a quien quiere disfrutar, porque en definitiva, es a la población que se busca complacer.

“Deberían retomarse en serio estas fiestas, la gente se merece eso, tener a sus artistas de cerca, porque hay muchas personas en pueblos que no pueden acudir a una discoteca, a ver a un artista, por el alto costo que implica las reservas, pero sí lo pueden ver en sus pueblos, a través de fiestas populares”, sostuvo Mateo.

SIN FAVORITISMO

Para Ramón Benito, mánager de Amarfis, retomar las fiestas navideñas proporcionaría dinamizar todo el entorno del entretenimiento: artistas, sonidistas, los de tarimas, vendedores de bebidas, de comida y muchos otros más.

Opinó que sería bueno favorecer con más asignaciones de bailes para aquellos grupos que tocan menos fiestas durante el año.

“Es propicio retomarlas, pero dentro del marco de la justicia, que no se cometan injusticias. Que los encargados de contratar las orquestas no hagan grupismo para favorecer a los suyos. Que la balanza sea para todos, tanto para los grupos bien establecidos, como los que no son tan famosos”, aseveró Benito.

PRESUPUESTO FIJO PARA FIESTAS POPULARES.

Amable Valenzuela es uno de los principales productores musicales del país y estima que es tiempo que las autoridades asignen una partida presupuestaria para financiar las fiestas navideñas.

Es de opinión que la música y la alegría constituyen el alma de los pueblos y que corresponde al Gobierno hacer que llegue a cada rincón del país, con las contrataciones de grupos musicales, sin importar categorías o géneros.

“Entiendo que el gobierno debería priorizar, seleccionar e incluir a las alcaldías y las gobernaciones para que se haga un presupuesto justo, acorde con presentaciones bien organizadas, sin exclusión de ningún sector que tengan el background y las herramientas para hacer una buena coordinación de los montajes”, indicó.

Valenzuela consideró que el país estás con ansias de disfrutar, luego de una larga espera debido a la pandemia del COVID-19, la recesión económica y pérdida de empleos que implicó la pandemia.

“Además de que la economía se mueve, porque de la industria del entretenimiento se ganan la vida millares de familias, que dependen de esa chimenea que solo produce nuestra música”, aseveró.

MÁS FIESTAS PARA GRUPOS PEQUEÑOS

Alberto Benabé consideró que el Gobierno debe poner todo su empeño en auspiciar estos eventos masivos y en los que realmente se involucra el pueblo, la clase más humilde.

No obstante, estima que debe favorecerse con más asignaciones de presentaciones a los denominados “artistas pequeños”, los menos populares, dar menos proporción a las orquestas Premium e involucrar los diversos géneros musicales.

Entiende que con 100 millones de pesos, bien distribuidos se alegrarían multitudes, en cada rincón del país.

DICIEMBRE PINTA ALEGRE, ANIMOSO, DIVERTIDO

Para el empresario artístico y productor de eventos, Raphy D`Oleo, las próximas fiestas navideñas prometen ser muy dinámicas, con gran afluencia de público.

“Luego de dos años de cierre, crisis y miedo, el dominicano retorna a su habitual actitud dicharachera y su identificadora camaradería. La llegada de los ausentes y visitantes extranjeros apunta a aumentar este fin de año y con ello se incrementa el circulante, mientras que el gobierno aprovechara la oportunidad para insuflar los ánimos festivos del pueblo dominicano”, sostuvo.

Sin embargo, D`Oleo está claro en que no habría inversión económica estatal como en otros años, debido a los ruidos generados anteriormente, pero de manera indirecta se harán contribuciones para el mayor esplendor de estas festividades.

“Una advertencia: guarden pan para mayo porque los 5 primeros meses del 2023 serán sumamente difíciles”, manifestó.