«El pasado 1 de diciembre, el comisionado ejecutivo para la reforma de la Policía Nacional, el señor José Vila del Castillo, ha realizado unas declaraciones que, además de ser irresponsables, atentan contra la dignidad y el honor bien ganado de miles de hombres y mujeres que durante muchos años, han dedicado tiempo y sacrificio para contribuir con dedicación y vocación de servicio a lograr y mantener la paz y el clima de seguridad pública que ha requerido nuestra democracia y los niveles de desarrollo que hoy exhibe nuestro país.

El solo hecho de hacer una declaración pública donde expresa textualmente que “la corrupción en la Policía comenzaba en la dirección general hasta el último raso”, sin aportar una sola prueba que pudiera sustentar estas graves acusaciones, involucrando de manera general a todos los directores generales y ex jefes de la Policía Nacional, constituye una afrenta inaceptable y un atentado contra nuestro honor y dignidad como entes ciudadanos y como servidores públicos que raya en el delito de injuria y la integridad de la honra personal, pues constituyen lesiones a la moral que no sólo perjudican a los miles de miembros de la institución policial, sino también a nuestras familias y al sagrado legado que nosotros, con muchos sacrificios hemos pasado a nuestros hijos, familiares y amigos.



Queremos dejar claro ante la sociedad dominicana, que ni ahora ni nunca nos hemos opuesto a los diferentes intentos de reformas a la institución policial, pues si estas han fracasado no han sido responsabilidad exclusiva de los pasados mandos, sino por la falta de continuidad de Estado del nivel político, ni mucho menos nos hemos opuesto a las políticas de combate a la corrupción que han fomentado los diferentes gobiernos, de las que no escapan las demás instituciones del Estado, y que estamos conscientes que es perentorio crear las condiciones necesarias para aumentar la calidad de vida y garantías institucionales del servidor público, con el fin urgente de erradicar ese mal, pero lo que no podemos aceptar es que incluyan en ese “saco” repugnante a mansos y cimarrones, ya que se convierte en un acto de injusticia inadmisible.

Por estas razones, los abajo firmantes rechazamos con la mayor energía lo expresado por José Vila del Castillo, a la vez que lo emplazamos a que demuestre con pruebas sus afirmaciones imprudentes, pues estamos dispuestos a defender el honor con las mismas fuerzas que defendimos a los ciudadanos arriesgando muchas veces nuestras vidas.



Finalmente, manifestamos aquí nuestro compromiso, en base a nuestra experiencia profesional e institucional, con el logro de una institución policial fuerte, respetada, moderna y bien motivada, propósito que debe ser logrado para garantizar los niveles de seguridad que nuestra sociedad reclama, pero nunca haciendo un ejercicio irresponsable de ignorancia y desprecio a la idiosincrasia y particularidades de un país.

Rafael Guillermo Guzmán Acosta
Mayor General, P.N.

José Paulino Reyes de León
Mayor General, P.N.

José Félix Hermida González
Mayor General, P.N.

José Ramón Mota Paulino
Mayor General, P.N.

Antonio Segundo Imbert Tessón
Mayor General, P.N.

Camilo Antonio Nazir Tejada
Mayor General, P.N.

José Aníbal Sanz Jiminián
Mayor General, P.N.

Rafael Guillermo Guzmán Fermín
Mayor General, P.N.

José Armando Polanco Gómez
Mayor General, P.N.

Ney Aldrín Bautista Almonte
Mayor General, P.N.».